Variedad y mesura
Siempre me ha resultado tremendamente agradable abordar un juego sin conocer demasiado sobre él, y así descubrir progresivamente lo que tiene que ofrecer. Esto es aún más satisfactorio cuando el título en cuestión cuenta con elementos que no te esperabas, o incluso se desarrolla de una manera muy distinta a la que tenías prevista. Es lo que me ha ocurrido con Terminator: Resistance, un shooter en primera persona desarrollado por Teyon, y con el que han sabido encontrar una fórmula interesante y completa, a pesar de las carencias técnicas que podamos encontrarnos. Cabe destacar que analizamos la versión Enhanced, una mejora para PlayStation 5 a partir del juego original, lanzado previamente en PlayStation 4 y otros sistemas.
En primer lugar, debemos tener cuenta que Terminator: Resistance se ambienta dentro del universo canónico de la saga cinematográfica Terminator, concretamente en el futuro en el que las máquinas controladas por Skynet se alzan contra la humanidad y la llevan al límite de la extinción, frenadas solo por la resistencia que lidera John Connor. Con esto, el juego nos lanza desde el inicio a un mundo postapocalíptico y desolado, creando una ambientación que será clave para el mismo gameplay y las mecánicas del juego. En este contexto, encarnamos al soldado Jacob Rivers, que aparentemente es solo un combatiente más, y nuestra misión se inicia como una simple búsqueda de la supervivencia, después de que todo nuestro escuadrón sea liquidado durante el ataque de un terminator con apariencia humana. A partir de aquí iniciaremos una búsqueda que irá tornándose cada vez más crucial y decisiva para el futuro de la humanidad, pasaremos de luchar simplemente para sobrevivir a ser la clave de la salvación.
En este aspecto, Terminator: Resistance saca a relucir una historia y un guion más interesante de lo que pueda parecer inicialmente, una narrativa que se vuelve interesante a medida que nos acercamos al final de la aventura. En paralelo a esta historia principal, el juego nos ofrece una línea de historias secundarias que se nutre de las típicas misiones opcionales y las decisiones que tomemos al dialogar con los distintos personajes que se crucen en nuestro camino. Nuestra inclinación hacia la amabilidad, la crueldad, la sinceridad o la mentira piadosa determinarán el destino de algunos de estos personajes, y nos abrirán las puertas a distintas tareas opcionales, y nos cerrarán las de otras tantas. Sin embargo, en este sistema se notan algunas carencias del título, presumiblemente derivadas de la falta de recursos, al no tratarse de un título triple A, y es que transmiten la sensación de que los hechos que ocurran serán consecuencias directas de cada respuestas, más que un camino construido progresivamente a través de las diferentes respuestas.
Aunque la historia y la narrativa cumplen su cometido con buenos resultados, el punto fuerte de Terminator: Resistance es, sin duda, su apartado jugable y cómo sabe condensarlo y aprovecharlo en las “escasas” diez o doce horas que debería durarnos la aventura. Lo que pensé que sería un FPS de características estándar en el que todo el peso recaería en la acción y tiroteos, resultó ser una interesante combinación de shooter, survival y RPG. Durante nuestras misiones podremos recorrer mapas relativamente abiertos, que nos ofrecerán múltiples rutas para acceder a nuestros objetivos principales y secundarios, así como para explorar en busca de recursos. Será esencial hacernos con todo tipo de materiales con los que fabricar recursos como munición, medicinas, explosivos o ganzúas, así como administrar dichos recursos de manera efectiva y sin despilfarrar. Por otro lado, los enemigos suponen una amenaza considerable, especialmente los terminators, que serán inmunes a las armas humanas y podrán aniquilarnos con solo unos pocos disparos. Al enfrentarnos a estos enemigos, el sigilo y las habilidades de hackeo serán nuestras mejores herramientas, y aquí entran en juego las mecánicas RPG que comentaba anteriormente.
A medida que eliminemos enemigos, completemos tareas o realicemos actividades como desbloquear cerraduras o hackear dispositivos, ganaremos puntos de experiencia, que no servirán para desbloquear capacidades distintas de un árbol de habilidades, como mayor resistencia al daño, habilidad para forzar cerraduras más difíciles o piratear dispositivos más avanzados, etc. Tendremos que priorizar las habilidades que se ajusten a nuestro estilo de juego y a la situación a la que nos enfrentemos. Teniendo en cuenta que los terminators solo son vulnerables a las propias armas de Skynet y que pueden aniquilarnos en cuestión de segundos, en mi caso fue muy efectivo optar por el sigilo y hackeo para combatirlos cuando aparecían en grupos numerosos. Escabullirse hasta las torretas fijas y hackearlas para que ataquen a los propios terminators nos ahorrará munición y salud, por ejemplo. Las posibilidades del juego nos permiten optar por eludir muchos combates buscando rutas alternativas, atraer a los enemigos hacia trampas explosivas o, si nos vemos con los recursos necesarios, combatirlos abiertamente. Es tremendamente satisfactorio resolver este tipo de situaciones tomándonos nuestro tiempo para evaluar el entorno y la mejor forma de actuar, para lo que nos será muy útil la herramienta de escaneo, un visor que nos permite localizar a los enemigos a través de paredes y otros obstáculos.
El gran inconveniente que lastra el resultado final de la experiencia es la escasa inteligencia artificial de los enemigos, que a pesar de ser tremendamente peligrosos son fáciles de predecir y, en cierta manera, manipular. Si un terminator nos detecta y huimos no nos seguirá durante demasiado tiempo, ni tampoco alertará al resto de enemigos cercanos, a no ser que estos también nos detecten por su propia cuenta.
Otro rasgo positivo de Terminator: Resistance es la variedad y cantidad de armas, objetos y tipos de enemigos con los que nos encontraremos. Dispondremos de más de 15 armas, además de granadas y otros artefactos ofensivos. Parte de este arsenal, las armas de energía de Skynet, podrán mejorarse combinando distintos chips que obtendremos en enemigos y contenedores, y que mejorarán aspectos como el daño, la cadencia o el tamaño del cargador, entre otros.
En lo técnico, Terminator: Resistance presenta un apartado visual bastante modesto en el modelado de personajes, que puede resultar anticuado. Sin embargo, se resuelve mejor en escenarios, iluminación y ambiente, dejandonos estampas postapocalípticas muy atractivas, en las que dominan los tonos grises y ocres, con atmósferas opresivas incluso en los exteriores. Es en el apartado sonoro dónde el título de Teyon puede sacar más pecho, ya que cuenta con las licencias de la banda sonora original de las películas, y con una gama de sonidos ambiente tremendamente inmersivos y bien logrados, especialmente si lo jugamos con cascos.
Una grata sorpresa
En líneas generales, Terminator: Resistance se presenta como una grata sorpresa, un título modesto pero que sabe aprovechar muy bien sus propuestas, e integrar distintos enfoques y piezas de diferentes géneros para lograr una receta muy efectiva y satisfactoria, acorde en lo jugable con la ambientación temática y narrativa de su historia. El apartado gráfico y la inteligencia artificial de sus enemigos lastran ligeramente la experiencia, pero aún así estamos ante un juego muy disfrutable, especialmente si eres fan de la franquicia Terminator.
Esta crítica ha sido realizada con un código de descarga para PS5 cedido por Meridiem Games.