Tangledeep

Un juego de conocimiento por sobre la habilidad

Tangledeep es un videojuego roguelike RPG desarrollado y distribuido por Impact Gameworks. El titulo cuenta con una cuidada estética pixel art y vista cenital que se centra en la historia de una heroína -a la cual nosotros debemos ponerle nombre si no queremos que éste sea aleatorio- que desea escalar la inhóspita torre de Tangledeep, donde le esperan monstruos y criaturas salvajes. El juego, como buen RPG, te deja seleccionar al comienzo de cada partida nueva un oficio, el cual no sólo cambia el enfoque del personaje, si usa más la magia o los ataques físicos, si opta una espada, un hacha o un bastón; sino que también influye en la misma dificultad del juego y éste lo transparenta al jugador desde el minuto uno pues, al preseleccionar a un oficio y abajo de su imagen, aparece un mensaje que indica la dificultad que tendrá el juego con éste, facilitando al jugador, sobre todo cuando es nuevo, en elegir una de las 9 posibilidades iniciales que se expanden a un total de 12 a medida que se van logrando diferentes hitos en el transcurso del juego.

Por otro lado, Tangledeep no deja de ser un roguelike, lo que quiere decir que, tras cada muerte, debemos comenzar practicamente de cero, con mucho énfasis en el “prácticamente” porque en este título son muchas las cosas que permanecerán en el mundo tras la muerte del jugador. Entre éstas se incluyen árboles que puedes plantar, que aportan recursos periódicamente, entregados al jugador cada vez que vaya al Hub principal -el cual juega un rol importantísimo y ya profundizaremos en él -, además, pasado el tiempo, se podrán cortar a cambio de experiencia y oro. Hablando de éstas, ambas son las monedas de cambio del juego. Los puntos de experiencia se van ganando con cada batalla victoriosa y sirven -entre otras cosas- para aprender nuevos movimientos con un arma a elección, teniendo el jugador la opción de especializarse en una sola arma o ir progresando en todas. El oro, por otro lado, servirá para comprar a varias mercaderes tanto comida, como armas y otros objetos de utilidad. También servirán para pedirle a un sanador que cure tu salud al máximo, sin tener que hacer uso de los preciados frascos de salud, los cuales van recuperando la salud del jugador gradualmente cada turno por un número específico de éstos, siendo conseguidos en los distintos pisos del juego de forma aleatoria, siendo estos siempre muy escasos, por lo cual depender sólo de ellos para mantener la salud en buen estado no es factible llegando a pisos más elevados.

Un elegante sistema de turnos

Pero creo que me estoy adelantando mucho a mí mismo, omitiendo la mecánica más importante del juego, que es el combate. El cual, si bien es por turnos con enemigos aleatorios dentro de cada piso, no aparecerán de la nada como sucede en Pokémon o en los antiguos Final Fantasy, sino que serán visibles desde cierto rango y, a menos que estos sean muy rápidos o no tengamos una vía de escape, podremos evitar el combate. Y este último se integra orgánicamente dentro del juego, siendo posible atacar a un enemigo desde lejos con un arco y flecha para llamar su atención y dañarlo en el camino y luego enfrentarse a él en combate cuerpo a cuerpo. En el enfrentamiento puede que aparezcan más monstruos de los alrededores a atacarte, alguno irán directo al ataque mientras que otros sólo se pasearán por el entorno y esto no depende de la especie de la criatura, sino que es algo que se deja al azar y que, como tal, puede cambiar en cada turno. ¿Cómo un sistema por turnos puede ser íntegro al resto del juego?, imagino que se estarán preguntando. Pues, en realidad, todo el juego se rige por este sistema, cada paso hacia adelante consume un turno y va lentamente rellenando una barra de turno extra que, si es bien utilizada, puede llegar a salvar la vida al jugador ya sea esquivando a ese monstruo que lo viene persiguiendo hace rato o dejándole asestar el golpe final antes de que el combatiente lo haga primero.

Hub principal

Ahora, un punto importante y casi ineludible en los RPG es el grindeo, lo que, en pocas palabras, significa combatir una y otra vez contra criaturas inferiores para subir de nivel y, así, poder combatir contra los monstruos más fuertes. Tangledeep también sufre de esto y siendo un roguelike a la vez que un juego de rol, es visiblemente más molesto luchar una y otra vez contra las mismas criaturas, que en los pisos inferiores tienen variedad, sí, pero no la suficiente para que el proceso no se haga repetitivo. Una medida que tomaron los desarrolladores para evitar que un jugador sea aniquilado en un piso por ir con un nivel muy inferior al recomendado es poner entre paréntesis y a un lado del número del piso el nivel de dificultad de éste en relación al nivel del jugador. Por lo cual, si ves dicha indicación al entrar a un nuevo piso, lo más recomendable es que demos media vuelta y nos dediquemos a subir un par de niveles en los pisos ya superados para adecuarnos al desafío que está por venir, lo cual resulta en una experiencia más tediosa de lo que suena en un principio, pues los roguelikes son de experimentar y aprender a cómo jugar; siendo la habilidad del mismo jugador lo que prima por sobre el resto de cosas. En cambio, Tangledeep al ser un RPG, incluye factores no deseados pero casi inevitables en el camino, lo cual puede cansar a muchos antes de adentrarse realmente en el título. Tampoco es que la habilidad sea irrelevante, pues más que habilidad mecánica, en Tangledeep importa más el conocimiento de las armas, de los objetos, pociones y, por sobre todo de los enemigos; de sus formas de atacar, de cuáles enemigos hacen ataques de rango y cuáles de área, cuáles pueden producir un estado negativo como parálisis o hemorragia y cuáles sólo pegan fuerte.

La disminución de la frustración

Si bien Tangledeep es culpable de numerosas cosas, también sabe reconocerlas y trata de subsanarlas. Aquí no estamos frente a otro Below, incapaz de arreglar o más bien orgulloso de sus rasgos más obtusos, sino todo lo contrario, hace que sean más tolerables ya sea tanto dándole la oportunidad al jugador de volver al hub principal en cualquier momento creando un portal -el cual no tiene ningún tipo de coste- que, después de un número de turnos determinado, transportará al jugador a salvo de sus enemigos donde podrá sanarse, comprar mejor armamento, buscar los frutos de sus árboles e, incluso, recoger a un monstruo de mascota. Sí, un gran punto a favor de éste juego es la inclusión de la posibilidad de dañar a un monstruo hasta que su vida esté en números rojos y, en vez de acabar con él, usar un mazo especial de un solo uso para noquearlo y guardarlo en un rancho donde podrás mejorar tu relación con él hasta que, en el nivel 3, te permita llevártelo a la torre de Tangledeep y luchar a tu lado. Para mejorar la relación con la criatura será preciso alimentarlo y/o  peinándolo y bañándolo. También, y si tienes más de un monstruo en el rancho al mismo tiempo, es posible que estos tengan un hijo y que éste sea más fuerte que sus padres. La criatura ira adquiriendo la mitad de la experiencia que gane el jugador -no quitándole la mitad- y subiendo de nivel para mantenerse útil a través de la aventura.

Una experiencia única con sus altos y bajos

En resumen, Tangledeep no es una obra para todos. Requiere paciencia, tiempo y dedicación lograr adentrarse realmente en su mundo y poder subir su peligrosa torre. Pero una vez superada esta barrera, se pueden conseguir partidas realmente únicas y divertidas, una especie de juego de rol clásico hecho a mano por y para el jugador. En el camino tendrá sus problemas y quizás pueda llegar a cansar, pero no es juego destinado a pasarse en una tarde, sino que todo lo contrario, es para dedicarle tiempo e ir aprendiendo de él hasta que se puedan superar los desafíos quizá no con habilidad, pero sí con conocimiento.

Este análisis ha sido realizado con un código de descarga para Nintendo Switch cedido por Novy Unlimited