Mi sentido arácnido me dice que a Sony le salió bien la jugada

Ahora que las fusiones y operaciones megalómanas están a la orden del día en la industria del videojuego, de vez en cuando toca hablar de operaciones frustradas (que originan otras exitosas). Para variar, Microsoft tiene un papel relevante en la operación, aunque por una vez no es el comprador, hace casi 10 años no tenía la misma capacidad financiera (o la misma tendencia a sacar la chequera) que en la actualidad, pero el gato al agua se lo llevó Sony. ¿Cómo, que de qué estamos hablando? Evidentemente (como viene indicado en el título del artículo), de la licencia de Spider-Man tras la finalización del acuerdo que existía con Activision, en busca de títulos de mayor calidad, y no solo que fueran títulos que se basaran en el nombre para recuperar la inversión realizada.

Tal y como se cuenta en el segundo volumen del libro Ultimate History of Video Games, este cambio de rumbo para las licencias de Marvel se dio en 2014, y a la vista de los resultados, que provocaron la venta de parte de los estudios de Square Enix a Embracer por el fracaso que supusieron Marvel’s Avengers y Guardians of the Galaxy, no se puede decir que todas las decisiones hayan sido correctas. Sin embargo, más allá de valorar numéricamente las consecuencias, creo que es más interesante dedicarse a la intrahistoria que podía haber dado lugar a un Spider-Man de la mano de Microsoft (al menos en la industria del videojuego), pero que por la preferencia de los de Redmond en crear licencias propias (y originales, se sobreentiende), pasaron de largo de la propuesta de Marvel, que acudió a Sony, la cual encargó a Insomniac, estudio independiente por aquel entonces, la creación de un rival para la serie Arkham protagonizada por Batman, que en aquellos años estaba en su máximo apogeo, antes del lanzamiento de Batman: Arkham Knight, que supuso el final de la misma por los problemas técnicos que sufría.

Spiderverse

En lo que a Spider-Man se refiere, Activision no estaba preparada para competir con juegos como Batman: Arkham Asylum. Sony sí lo estaba. A día de hoy, los juegos de Arkham y Marvel’s Spider-Man no tienen rival entre los juegos de superhéroes en cuanto a ventas, con una fuerte caída para el siguiente nivel. En 2020, cuando Sony se preparaba para lanzar PlayStation 5, el juego exclusivo que encabezaba ese lanzamiento era Marvel’s Spider-Man: Miles Morales.Jay Ong, vicepresidente de la sección de videojuegos de Marvel

Sin llegar a comprender los motivos que llevaron a Microsoft a ignorar esta oportunidad (sí, las licencias propias están muy bien, pero a Xbox One probablemente una cara conocida como la de Peter Parker o Miles Morales seguro que le hubiera venido de perlas), no deja de ser similar a lo que hizo la propia Sony con las licencias de Marvel a nivel cinematográfico (pudo adquirir en 1998 lo referido a todos los superhéroes de la marca por 25 millones de dólares, pero optó por desembolsar “sólo” 10 millones por tener al Hombre Araña en exclusiva). Y es que adivinar el futuro es imposible, pero intentar jugar a los universos paralelos tampoco se queda corto.En caso de haber aceptado el ofrecimiento, ¿hubiera delegado Microsoft el desarrollo correspondiente en un estudio independiente, o hubiera optado por cubrirlo con recursos propios? ¿Habrían sido capaces de comprender qué le hacía falta a un juego de Spider-Man para dejar de lado el papel de juego licenciado y tener carácter propio? ¿Hubieran, incluso, acudido a la propia Insomniac Games? Después de todo, en el propio año 2014 se publicó Sunset Overdrive como exclusivo para Windows y Xbox, por lo que las relaciones entre empresas eran, cuanto menos, fluidas, y no sería hasta 2019 cuando Sony anunciaría la adquisición del estudio. Ese tiempo de margen puede que nos hubiera quitado a Miles Morales, pero nos hubiera dado a otro héroe mordido por una araña genéticamente modificada. Después de todo, los caminos del multiverso son inescrutables.