Vientos de cambio
Si sois de esos poquitos fans acérrimos que siguen ilusionados nuestras desventuras en plataformas externas como iVoox o YouTube, a buen seguro habréis recaído en que HyperHype no está pasando por su mejor momento. Nos hallamos en meses difíciles, con la mira ya puesta sobre un E3 que se antoja más laborioso de lo que a priori parecía, un calendario de lanzamientos ajetreado y un esprint laboral final de carácter tradicional al que ya deberíamos de estar más que acostumbrados, pero que no por ello deja de alejarnos, primavera tras primavera, de aquellos proyectos ajenos a nuestras labores socioeconómicas – como se trata de esta web – a los que tantísimo tiempo y esfuerzo dedicamos durante el resto del año. Pese a los recientes fichajes de cuyos textos habéis podido disfrutar estos días, el ritmo de los contenidos se resiente en unos meses de mayo y junio en los que sinceramente preferimos priorizar la calidad a la cantidad, con tal de proseguir con nuestra misión pseudo-periodística y diferenciadora.
Pese a ello, lo cierto es que los principales colaboradores del canal de YouTube asumimos la difícil pero necesaria decisión, semanas atrás, de tomarnos un pequeño respiro, acabando esta primera temporada – quizás, de una manera un tanto abrupta – con una arriesgada crítica sobre una propuesta mainstream como Preguntados. No obstante, no llegamos a dicha conclusión en busca de descanso; necesitábamos tiempo para reenfocar un proyecto que, pese a nuestros constantes esfuerzos, no parecía que acabase de despegar. En el momento de redacción de estas líneas, han pasado más de 365 días desde que nos propusimos subir al canal una vídeo-reflexión, tesis, análisis o avance semanal, al margen de la perpetuación de nuestro podcast, y pocos han sido los jueves que no hemos podido cumplir dicho objetivo. Sin embargo, esta constancia, completamente desvinculada de cualquier tipo de mala praxis – nunca nos hemos sentido especialmente cómodos con el follow por follow, ni hemos colaborado con quien no teníamos una nimia relación por meras cuestiones de alcance -, no ha contado con la recepción popular que esperábamos, aunque sí que nos ha servido para conformar una diminuta pero francamente activa comunidad de la que nos sentimos tremendamente orgullosos, y con la que esperamos volver a vernos las caras a la vuelta de este parón. Porque si llegado el momento habrá alguna razón especial por la que volver a las andadas, esa sois vosotros.
Ñoñerías aparte, pienso que lo relevante de todo esto, y la razón por la que al fin y al cabo nos hemos reunido hoy aquí, es otra: ¿qué pretendemos conseguir con esta pausa? En primer lugar, creemos necesaria una reestructuración del formato y del contenido. Desde su concepción, HyperHype siempre se ideó como un portal crossmedia capaz de retroalimentarse entre las diferentes plataformas, así como de unificar a su público en múltiples formatos de los que se presumía fan. No obstante, con el paso del tiempo hemos podido comprobar de primera mano cómo no a todo el mundo le agradan los vídeos concentrados, de la misma manera que no todo el mundo dispone del suficiente tiempo como para escuchar nuestros podcasts completos. Esto genera una disonancia que, irremediablemente, acaba impactando negativamente en las estadísticas del canal, contribuyendo a un mal posicionamiento de todo su contenido y a un nefasto trato por parte de la plataforma. Y es una disonancia problemática, pero de fácil solución: a partir de ahora trabajaremos en dos canales de manera permanente. El actual quedará relegado a los cortos de divulgación que subíamos los jueves, mientras que el nuevo, HyperHype Podcast, quedará relegado únicamente a dicho contenido. Cuando migremos todos los episodios os lo haremos saber.
Asimismo, necesitaremos un tiempo para hacer un pequeño regroup, así como para expandir nuestro equipo sin que ello conlleve una pérdida de calidad por parte de los contribuyentes. Alejandro Maciá, uno de los más veteranos colaboradores del canal, comenzó hace escasos meses su andadura con Mannheim, su último EP, por lo que no podrá colaborar con la misma periodicidad que hasta ahora, aunque seguirá formando parte del proyecto tomando cartas en sus decisiones creativas. Dicho lanzamiento se alza como un impacto directo en nuestra organización interna, forzando el trabajo del resto de colaboradores con tal de mantener un ritmo que acaba haciéndonos un flaco favor, obligándonos a bajar el tan elevado listón que, considero, tenemos. Es por ello que no volveremos a la carga hasta que ampliemos nuestra plantilla y todos los integrantes de la misma podamos colaborar cómodamente, sin que eso repercuta negativamente en el resto de quehaceres que comprenden nuestra vida cotidiana. Afortunadamente, no creo que tardemos demasiado en readecuarnos a la situación. Llamadme optimista.
Por último – pero no menos importante – trataremos de mejorar el conjunto a nivel técnico, volviendo a la carga con nuevo material y con un lavado de cara a nivel gráfico que ya nos iba haciendo falta (podéis juzgar por vosotros mismos en los dos tipos de miniatura que se pueden apreciar sobre estas líneas). Nos encontramos trabajando en grafismos de todo tipo, y esperamos que con ello podáis asimilar de una forma aún más dinámica y entretenida ese ingente amasijo de ideas que todavía tenemos para contaros. Os aseguro que quedan vídeos para rato, y que si de algo nos alegramos de esta suerte de despedida es de la oportunidad que eso conlleva para volver por todo lo alto. Esperamos que seguíais ahí a nuestra vuelta, porque, si es por nuestra parte, podéis darlo por hecho.
Nos volveremos a ver.