Menos da una piedra
Las remasterizaciones son uno de los pilares de la industria actual, y tiene bastante sentido cuando la nostalgia y lo que más nos afecta emocionalmente es lo que vende, la llamada vieja confiable. Esto se vio muy bien en las consolas retro mini, como la NES y SNES, porque de la PS1 se esforzaron tan poco que ahora mismo te la puedes comprar por menos de 15 pavos. La convicción de que el pasado es lo mejor camuflado de un falso avance es lo que más ganancias genera, o si no que se lo digan a JJ Abrams, así que hemos llegado al punto donde la excepción no es el remaster o el remake, sino una nueva IP o cualquier cosa que nos aleje de aquello que ya conocemos, pero lo suficiente para que no nos sepa extraño.
Revivir sagas muertas no deja de ser otro mecanismo más en esto, y como bien vimos con Shenmue 3 o Postal 4 (este último en early access) no siempre es la mejor opción. Sin embargo, la gente lo sigue pidiendo, así que es lo que tendrá, aunque no siempre. Katsuhiro Harada, productor general de Bandai Namco y concretamente productor de la saga Tekken, ha dicho que dentro de la empresa se barajó en varias ocasiones la opción de remasterizar Xenosaga, pero que tras hacer estudios de mercado y calcular que económicamente no era viable, al final no ha llegado a ver la luz. Fue bastante popular en Europa y Japón cuando salió allá por la era de PS2, pero aún así no ha cuajado lo suficiente ese deseo de un remaster. Bastante gente se quejó de esto y que la credibilidad de dichos estudios de mercado, pero ni con esas, así que bastante tendría que cambiar el panorama para que al final el proyecto saliera adelante.
Los remaster son como las setas, las apariencias engañan, y ese tan bonito que te llevan vendiendo durante años al final puede saber a rancio o peor: ser como el juego original y darte cuenta de que en realidad no era tan bonito como lo recordabas. No he tocado ningún título de Xenosaga, así que no puedo decir nada de cómo puede adaptarse al ritmo actual a nivel mecánico siendo un RPG, y ahora cada vez que pienso en la palabra “remaster” recuerdo el de Medievil y no creo que sea a lo que queremos aspirar. Podría volver en forma de remake, como lo están haciendo los Resident Evil o Final Fantasy 7 (que, por cierto, sale en nada), pero eso implica mucho curro para títulos que, como ya han dicho, no están seguros de que vayan a vender bien. Todos nos alegramos con la nueva llegada de Katamari Damacy, pero al final ¿quién lo ha vuelto a jugar? Tiene su público, por supuesto, pero de toda la gente que conozco creo que soy el único que lo ha hecho, y si otro lo ha hecho no ha sacado el tema.
Al final del día, un remaster tampoco te llega a asegurar nada. Ventas tendrá, por supuesto, pero es muy difícil que gane nuevo público. Vanquish funcionó tan bien porque el gameplay, aunque huele a viejo, no está obsoleto. Los Final Fantasy funcionan por el simple hecho de ser una saga tan famosa, pero muchos los compran y los juegan con los combates acelerados porque no soportan el tedio de grindear con los sistemas antiguos. De nuevo, todas esas ventas suelen venir por la nostalgia a no ser que hagas un remake completo. Soy el primero que quiere probar todos esos juegos que pasé por alto, ya sea por no tener la consola o por no saber de su existencia, pero es que cuando tengo oportunidad de jugar por primera vez a Silent Hill II es o a partir de muchos parches de fans en PC (porque los controles diréis lo que queráis, pero dan ganas de quitar el juego y no precisamente por miedo) o con un remaster pocho en PS3, así que mi opción es, cómo no, comprarme el original, y estamos hablando de una de las sagas más veneradas de la industria. Los remaster son una opción a la piratería buenísima por esa misma razón, por ejemplo, pero es un tema algo más complicado. La idea con la que hay que quedarse es esta: si quieres un juego, tienen que ser muchos los que te acompañen en ello, así que cojamos pancartas, plantémonos en las oficinas de Bandai Namco y exijamos de una vez por todas Tekken X Street Fighter.