Los accesorios como método de venta de Switch

Sin revisiones, toca ver complementos

Nintendo Switch ha cumplido un año. El nuevo concepto propuesto por Nintendo en su momento parecía ser algo arriesgado para la compañía nipona, y creo que nadie pensaba que sería un éxito rotundo de ventas.

Hace unos días un corresponsal de tecnología de Wall Street Journal en Japón, Takashi Mochizuki, confirmó que en el ambiente de la gran N no hay pretensión de una revisión para su nueva consola por lo pronto: la compañía buscará, en todo caso, conseguir más ventas por medio de los accesorios o periféricos que se vayan realizando, con la idea fija de sacarle todo el potencial a su nuevo hardware.

Superandose a sí misma

Es cierto que Nintendo siempre ha sido de sacar accesorios para sus consolas, aunque aquí estamos hablando de algo un tanto distinto a lo que ya nos habíamos acostumbrado: aquí la cosa no irá de amiibos o mandos de colores, si no más bien de nuevas experiencias de juego.

Ya algo de todo esto hemos podido ver con Nintendo Labo, que en su trasfondo propone una experiencia donde los más pequeños y los más grandes aprendan jugando cómo funcionan estos nuevos accesorios de cartón, tanto a nivel físico como digital. Con la posibilidad de crear nuevas posibilidades metiéndole mano al software, todo indica que Labo será uno de muchos escalones para Switch, o por lo menos así lo dejó planteado Shinya Takahashi al confirmar que desde Nintendo hay otros conceptos más en desarrollo.

Con esta idea como un primer paso, Nintendo tiene por objeto cimentar al accesorio como un método de venta. Obviamente que muchos no estarán de acuerdo, y puede que estén en lo correcto: quizás Labo no venderá como esperan desde Nintendo, pero la incursión ya estará hecha.

Miyamoto, hablando sobre Labo, expresó que Nintendo es una empresa que apunta a repensar las maneras de jugar, escuchando y acogiendo propuestas que puedan concretar ese ideal. Es claro que todos entendemos que a la empresa nipona se ha encaminado a crear productos que tengan más versatilidad que potencia bruta, y es allí donde a todos maravilla y conquista.

Todo parece indicar que la compañía se centrará este segundo año a mostrar más de estas experiencias, y es algo para celebrar que así ocurra. Con más de 15 millones de consolas vendidas a finales de 2017, y con el objetivo de llegar a veinte para el comienzo del nuevo año fiscal, todo indica que la empresa se ha recuperado con creces de WiiU, dejando más que claro que un buen concepto y un acertado marketing hacen maravillas.

Las revisiones ya llegarán: sentémonos a ver que otra locura propondrá Nintendo con Switch.