Klonoa Phantasy Reverie Series

Salvados de los vientos del olvido, o casi

Aun recuerdo con cariño la manera con la que miraba a los videojuegos hace mucho tiempo, una tierna visión donde pocas cosas importaban más allá de pasar un buen rato jugando por la tarde después de hacer la tarea, o incluso ir a la casa de algún amigo como una visita fugaz y buscar alguna excusa para acabar disfrutando del último juego que le habían regalado. Las tardes de cumpleaños jugando a cualquier juego de peleas de Dragon Ball, los ratos con la revista entre las piernas para meter todos los trucos del Grand Theft Auto: San Andreas que se pudiesen y así convertirnos en el convicto más buscado del estado, un ente inmortal que perduraba en el tiempo a pesar de los intentos de una desesperada policía, al contrario que estos momentos que por desgracia tienden a desaparecer. Como podréis haber intuido, en mi casa no entraban todas las consolas, y muchos menos todos los videojuegos, quedando relegadas a la visita de algún amigo que se trajese sus propias compras. Es por ello que, algunas veces a contracorriente, defiendo (en la medida de lo posible y correcto) la creación de remakes/remasters/lo que sea, todo aquello que me permita jugar en la actualidad a aquello que en su momento se me negó me suele parecer bien, y este es el caso de Klonoa Phantasy Reverie Series, que, aun con sus aciertos y sus errores, logra satisfacer a alguien que jamás había tenido la oportunidad de jugarlos.

La fina línea entre el producto original y cuánta modificación se le puede realizar al mismo para contentar a todo el mundo se encuentra en un terreno muy endeble, prácticamente inexistente, y aunque en el equilibrio está la virtud, se tiende a desviarse, aunque sea unos pocos centímetros del lugar ideal. Pero debemos tener en cuenta en estos contextos que es prácticamente imposible contentar a todo el mundo, y si esta es nuestra última misión, posiblemente fallemos y acabemos tocados. A pesar de ello conviene revisar cuánto estamos dispuestos a dar la mano, esto desde el punto de la desarrolladora, pues en el caso de Klonoa Phantasy Reverie Series nos encontramos ante dos juegos bastante divertidos que han logrado sobrevivir a una brecha temporal bastante pronunciada si somos sinceros, sobre todo teniendo en cuenta cómo los entornos 3D han evolucionado desde entonces. Este buen hacer deja el fallo en otro lado, y que desarrollaremos más adelante, pues inicialmente quiero contar mi experiencia como alguien que ha llegado completamente nuevo a esta saga que goza de una muy buena reputación y hasta qué punto ha logrado cumplir con dichas expectativas.

Para quien, al igual que yo, no esté familiarizado con la saga Klonoa, Klonoa Phantasy Reverie Series es la remasterización de los dos títulos originales Klonoa: Door to Phantomile y Klonoa 2: Lunatea’s Veil. Estos dos juegos fueron lanzados en PSX y PS2 respectivamente, siendo el segundo la secuela directa del primero. Ambos son entregas de plataformas en 2.5D donde, a pesar de movernos normalmente entre los dos ejes principales, en ocasiones encontramos caminos que usan el tercer eje para así bifurcar los escenarios y la mayoría de veces esconder secretos en ellos. Esta remasterización ha supuesto un lavado de cara para dos juegos, que, a pesar de todos los años pasados desde su lanzamiento, tampoco es que hayan envejecido de mala manera, pues en lo jugable nos encontramos con similitudes directas a las encontradas en los juegos originales, unas diferencias apenas visibles que, más allá de algún cambio en calidad de vida, no suponen mayores alteraciones. Ambas entregas son increíblemente disfrutables, pues al mezclar en este cóctel una historia correcta junto a algunos diseños cuanto menos curiosos, característicos de la época, dejan un producto resultón que se puede gozar increíblemente a día de hoy, sobre todo durante la escasez que sufre este género y más concretamente el 2D. Pero no todo puede ser perfecto.

Klonoa Phantasy Reverie Series efectivamente es la remasterización de los dos primeros juegos, pero eso no significa que no haya ninguno más a partir del lanzamiento de ambos, en todo caso es lo contrario, pues a raíz del momento en que salieron los títulos se fueron lanzando uno nuevo tras de otro, siendo mayoritariamente spin-off sin importancia aparente en el cómputo global de la historia, pero que, aun así, aportaban a una saga que se siente un poco despreciada teniendo en cuenta que la razón de esta recopilación es que es el 25 cumpleaños de la saga. Está claro que desde el punto de vista de una gran empresa obviamente no interesa traer todos sus juegos en un único pack cuyo precio no vas a poder poner por las nubes, dejando la puerta abierta a que, en un futuro, salgan más recopilaciones, tal vez temáticas, tal vez por orden, donde ir trayendo todo su trabajo a los tiempos modernos. O simplemente no hacer nada y quedarse con la remasterización de sus juegos principales, dejando de lado un trocito de historia destinada al olvido en los tiempos modernos. Desconozco cuál de estos dos posibles caminos haya tomado la gente de Bandai Namco, pero en el fondo duele que estas cosas ocurran, sobre todo cuando se ha puesto énfasis en hacer las cosas bien, y traer juegos con más de veinte años a las consolas actuales, permitiendo de esta manera que tanto la gente que en su momento no pudimos jugarlos como la que es más joven que estos tengan un acceso sencillo a unos juegos que, de no haber existido Klonoa Phantasy Reverie Series nos habríamos visto obligados a buscar copias de dudosa calidad de segunda mano y tener acceso a consolas que a día de hoy difícilmente aguantan el paso del tiempo. Es por ello que fastidia que se hayan dejado contenido atrás sin dar alguna explicación al respecto, pero por suerte o por desgracia, son ellos los que tienen la última palabra.

Dos grandes juegos que han sabido mantenerse igual de frescos que cuando salieron

Como conclusión nos encontramos ante dos grandes juegos que han sabido mantenerse igual de frescos que cuando salieron, lo cual es loable por el buen trabajo que se hizo en su momento, y el realizado ahora al saber respetar e incluir algunas pequeñas mejoras para hacer el juego más accesible si se quisiese, sin tocar mucho más allá de este apartado anecdótico, ya que no le hace falta para triunfar. Pero el punto negativo existe y es sobre el que os he hablado, la alegría que produce poder gozar dos juegos considerados de culto, pero el agrio sabor que deja en la boca saber que, si se hubiese replicado dicho trabajo en los otros títulos que posee la saga e incluido en este pack, habría sido la guinda sobre un apetitoso pastel, algo que por desgracia no ha pasado y no sabemos si ocurrirá más adelante en el tiempo, o si por otro lado nos quedamos cojos, perdiendo en los mares del tiempo unos productos que rozaron esa segunda vida y la cual se les ha denegado. Comprendo que son empresas, y su objetivo final es sacar dinero, pero eso no quita que siga escociendo una decisión empresarial como esta, ojalá el tiempo haga justicia.

Esta crítica se ha realizado con un código de descarga para PlayStation 4 cedido por Bandai Namco.