You can (and should) advance
Sin muchas pruebas, pero tampoco dudas, podría afirmar que el año 2016 fue un gran año. Tal vez no muy bueno teniendo en cuenta que alguien como Donald Trump llegó al poder, y hubo algún que otro acto cuanto menos deleznable. Pero si entramos a la industria del videojuego, que es al final el entorno donde nos movemos, encontramos que este año tuvo algunos lanzamientos sobre los que se sigue hablando a día de hoy, como sería The Last Guardian, Final Fantasy XV o mismamente No Man’s Sky, a pesar de que su lanzamiento fue, cuanto menos, duro, algo de lo que han sabido recuperarse.
Pero hoy no toca hablar de videojuegos precisamente ya que nos centraremos en algo más específico, efectivamente, en la prensa del videojuego, y no en una cualquiera, sino que hoy pivotaremos sobre la prensa escrita del videojuego, concretamente en Games Tribune y su sello editorial. No es la primera vez que hablamos sobre el trabajo de los compañeros de GTM, un equipo que ha sabido hacer algo que creíamos relegado a tiempos pasado, revivir la prensa escrita de videojuegos en España, recabando un éxito que se traduce en 79 números de la revista especial, infinidad de láminas exclusivas, otros tantos especiales y unos cuantos libros en su haber. Pero parece que esto nunca fue suficiente, y sus ganas de expandirse nos traen a este artículo, pues su último lanzamiento ha sido, nada más y nada menos, que una revista enfocada en la industria del anime y manga, pero con cierto enfoque a las personas que hay detrás de las obras, este es el comienzo de lo que esperemos sea un largo camino, esto es Kaibun.
Kaibun es el nombre que recibe esta publicación física de la mano de Games Tribune, y a diferencia de sus otros trabajos, como podrían ser los libros publicados o los artbooks, esta nueva línea editorial está pensada para mantenerse en el tiempo, actualmente con dos lanzamientos al año, aunque quién sabe lo que nos pueda deparar el destino. Dentro de ella no podemos esperar los contenidos exclusivamente centrados en los videojuegos que se proporciona en GTM, pues aunque sí que se habla de videojuegos, mayoritariamente traídos del país nipón, el contenido de esta revista no radica en tener esa pieza como único pilar sobre el que cimentarse, pues este es el primer punto que trataremos, qué es lo que vertebra las publicaciones que iremos recibiendo.
En este caso, como primer número, hay un tema principal que ocupa buena parte del contenido de la revista: los mechas, robots gigantes que normalmente enfrentan enemigos de tamaño similar o superior y que pueden ser tanto otros mechas como feroces bestias de tamaño colosal. Tal vez en Occidente no estemos muy al tanto de este género, pues más allá de Pacific Rim, El gigante de hierro o incluso Transformers no vemos más representaciones mínimamente similares. Sin embargo, en la cultura del anime o incluso en la cinematográfica sí que son bastante comunes, si no que se lo digan a la generación de nuestros padres con Mazinger Z. Aprovechando que es algo relativamente recurrente en el mundillo del manga anime, la primera revista nace con esta concepción, y lo encontramos de frente con la portada, una ilustración donde vemos a algunos de los pilotos y robots más famosos de la industria, dando una pequeña pincelada a lo que encontraremos en su interior. Para un futuro número 2 no tenemos por qué esperar encontrar de nuevo la misma temática, ya que de primeras cada revista contará con un tema único diferente a los anteriormente explorados, donde los próximos protagonistas vendrán de mundos de fantasía oscura. Sin embargo, todo esto son pequeñas pinceladas externas y meramente estructurales, pues lo verdaderamente interesante se encuentra en el interior, y el cual procedemos a diseccionar.
Por mis manos han pasado una amplia variedad de revistas de videojuegos, más concretamente las de los últimos tiempos como podrían ser Manual, Games Tribune, Loop o incluso Lock on, de procedencia británica. Si tuviese que encajar en algún lado a Kaibun posiblemente me decantaría por lock-on antes incluso que la propia Games Tribune, y esto ocurre por varias razones. El primero, y tal vez de los más destacados, sería la composición de los textos, cómo estos, aun existiendo unos cuantos que se vertebran en torno al tema principal, dejan hueco para otros escritos muy valiosos, pero que no necesariamente tienen por qué reflejar el tema inicial. En este contexto podemos observar las similitudes que tiene con la revista inglesa, pues en esta, al comienzo de la revista en cuestión, encontramos una serie de textos similares pues todos ellos tienen un tema en común, pero llegados a cierto punto la variedad de textos aumenta y tratan cosas radicalmente distintas.
En el caso de Kaibun no se van por las ramas y empiezan a hablar de cualquier cosa, sino que recoge el modelo de GTM y nos trae análisis (en esta ocasión de animes, mangas y videojuegos), reportajes y demás textos que normalmente encontramos en esta publicación, además de algunos completamente nuevos como las pequeñas ventanas a la cultura japonesa. El segundo punto, y que solo encontramos en el inicio de la revista, es la colaboración con artistas para ilustrar artículos. Puede no sonar a mucho, pero desde GTM siempre han trabajado con grandes artistas para ilustrar sus portadas, láminas, reportajes sobre personalidades del videojuego e incluso los marcapáginas que llegan mensualmente. Ver que en esta ocasión han decidido otorgar una ilustración a todos los artículos relacionados con los mechas me alegra de sobremanera, pues es algo que he disfrutado un montón durante la lectura de Lock on, donde también tiran de este tipo de colaboraciones, y dan un toque de excelencia muy notable a un producto final que roza la excelencia.
Sangre de su sangre
Kaibun conoce suficiente de GTM, y sabe distanciarse en la medida necesaria de ella para así poder crear su propio camino con sus manos, una labor encomiable pues esforzarse para distanciarse de aquello que les hizo grandes y explorar otras posibilidades es cuanto menos respetable. Pero aun así conserva ese alma que se encuentra presente en todas las publicaciones de Games Tribune, la búsqueda de la perfección tanto en el contenido como en el ensamblaje, donde destacan los valores de producción y maquetación, dos de los estándares que GTM lleva por bandera y cuya alma insuflan en este nuevo trabajo.
Está claro que para entrar en Kaibun antes debes de estar interesado en el contenido con el que trabajan, pues al final no son los videojuegos a los que estamos acostumbrados, pero me alegra enormemente que se animen a explorar otras costas, ya que los resultados pueden ser tan satisfactorios como el producto final que tengo en mis manos. Si estás no solo interesado en la cultura del manga y el anime, sino también en lo que es el la cultura japonesa y los engranajes que posee esta industria, estoy muy seguro de que esta publicación te va a encantar, pues todo va de la mano y cumple de sobremanera. Solo queda confiar que el éxito que han cosechado se repita una y otra vez, y Kaibun logre ser la revista que perfore los cielos.
Esta crítica se ha realizado con un número adquirido por la propia redacción.