Manos a la obra, señorita Alyx...
Half-Life es un juego que a estas alturas apenas necesita presentación. Ha sido comentado en muchísimos sitios y medios, desde el análisis de su mundo y cómo te hacen creer que Black Mesa puede ser un lugar real hasta un mapa que te muestra todas y cada una de las singularidades del juego en tiempo real con gameplay en una esquina para que sepas la zona por la que te mueves, sin olvidarnos del entretenidísimo video que son simplemente logs de ordenador (estos también sacados de Black Mesa, el remake del original) y que está a la altura de La Guerra de los Mundos narrada por Orson Welles. La segunda parte supo traer las físicas a los videojuegos de una forma estandarizada, gracias a Havok y su motor de físicas con el mismo nombre, el cual revolucionó nuestra forma de interactuar con el entorno. Y de repente, todo paró.
Half-Life 3 (mejor dicho, Half-Life 2 Episodio 3) nos lleva persiguiendo como fantasma y meme desde hace más de 12 años, cuando se lanzó el Episodio 2. Han salido muchísimos rumores de su desarrollo, de si tras el lanzamiento de Portal 2 harían un crossover de ambas sagas al perteneces al mismo universo, pero pasaron los años y el mito se convirtió en meme, y la losa de la tumba la selló el guion lanzado por uno de los principales escritores de la saga de lo que iba a ser este punto y final a la historia: una triste carta que relata los hechos acontecidos en la búsqueda del Borealis. Sé que hay gente que no quiere conocer el guion (o más bien cómo iba a ir enfocado el juego), así que no diré nada. Se organizó también una Jam para lanzar una versión de Half-Life 3 a partir de dicho guion y los proyectos tuvieron su chicha, junto a que existe el llamado Project Borealis que quiere dar a luz este proyecto de terminar una obra inacabada.
Y de repente, la filtración. Ya se sabía que Valve quería dar un golpe en la mesa y decir “la VR os la vais a comprar porque podéis jugar a esto”, pero estoy más que seguro que, aunque todos soñábamos con un posible retorno de Half-Life o Portal, creíamos que no iba a ocurrir, pero ha sido el caso. Half-Life: Alyx será presentado mañana por Valve, donde presumiblemente seguiremos la historia de Alix Vance en el periodo entre Half-Life y Half-Life 2. Se sabe que su padre, junto con el Dr. Kleiner, trabajaron con Gordon en Black Mesa, pero para entonces Alyx tenía que ser una niña. Será interesante ver cómo desarrollan la historia justo después de la guerra de las 7 Horas y cómo la familia Vance salió adelante en ese terreno hostil; pero, por supuesto, no hay que dejar de pensar de qué saga estamos hablando.
El problema de un hipotético Half-Life 3 es que se llama Half-Life. Esta saga es conocida en gran parte por lo revolucionaria que es a nivel de mecánicas y narrativa, el manejo de los scripts y de cómo con solo ver una textura sabes de qué juego estamos hablando. Tiene muchísimo carácter, pero también suele conllevar una alta expectativa. Una de las consecuencias de esto es que tendría que volver a revolucionar la industria de nuevo, y en un entorno donde los indies han tomado tantísima fuerza y los AAA quitando contadas ocasiones se arriesgan es difícil. Por eso confío en que la Realidad Virtual es el mejor medio para expresar esta nueva historia, ya que la realidad virtual aún a día de hoy es un terreno algo pantanoso en el que nadie se quiere mojar y en el que no hay nada definido. Por supuesto que va a ser una forma de vender más sistemas, eso está claro, pero no te sirve solo con decir que vas a sacar un juego de una saga de renombre como Half-Life, porque si tocas una saga tan sumamente relevante e importante para la industria mejor ir con pies de plomo. El juego adecuado en la plataforma equivocada puede cambiar el rumbo de la empresa.