Una entrega con sus más y sus menos
The Legend of Zelda: Skyward Sword HD llega hoy a las tiendas, una obra polémica que seguro atraerá la mirada de la mayoría de jugadores empedernidos. El refrito de Nintendo es el lanzamiento más destacado del día de hoy, pero si eres un aficionado al automovilismo tu foco de atención quizá haya recaído en Formula 1 2021, la última entrega de la saga de Codemasters. No voy a negar mi doble vara de medir con estos videojuegos de deportes anuales. Al mismo tiempo que se me llena la boca criticando FIFA, mi biblioteca de Steam está copada de títulos de Formula 1. Y no lo digo en vano, pues poseo casi todas las ediciones desde el 2012 hasta el presente, porque si hay una cosa que me gusta más que los píxeles son las carreras.
Si ayer celebrábamos la presentación de los nuevos coches que competirán en el pináculo del automovilismo, hoy estamos aquí, otro año más, para hablar del F1 de turno. Aunque, antes de ponernos manos a la obra con el título que nos atañe, quería comentar una cuestión decisiva en el devenir de la saga, y es la compra de Codemasters por parte de EA que se anunció el pasado febrero. Así pues, Formula 1 2021 es el primer videojuego del Gran Circo publicado por Electronic Arts desde F1 Challenge ’99-’02 de 2003. Esta entrega es una de las más estimadas de la franquicia por los jugadores debido a su amplísimo contenido y a una comunidad que lo expandió sobremanera gracias a los mods. Así pues, coincidiendo con las nuevas regulaciones del deporte, el año que viene podremos ver la influencia de la compañía en los títulos de la Fórmula 1 que, espero de corazón, no incluya mecánicas que empañen la experiencia de juego.
Estos días he estado leyendo reseñas o viendo reviews del videojuego, y entre otras cosas se ha calificado a esta entrega como la mejor de todas, la experiencia definitiva y otras tantas medias verdades que solo son un cebo para los posibles compradores del título. Objetivamente no puede ser ni lo uno ni lo otro debido a la falta de algunas funcionalidades presentes en anteriores ediciones. Esto ha frenado la constante introducción de novedades en la saga que Codemasters mantenía desde hacía unos años. Quizá estas ausencias no sean cruciales para el disfrute de Formula 1 2021, pero, en efecto, suponen una pérdida nada desdeñable con respecto a pasadas entregas. Estoy hablando de dos cuestiones: los coches clásicos y los trazados cortos.
Desde que en 2017 se introdujeran los primeros monoplazas antiguos —como el Ferrari F2004 de Michael Schumacher o el Renault R26 de Fernando Alonso, entre otros— cada año se han ido añadiendo nuevos vehículos históricos que han hecho las delicias de los más nostálgicos. Unos coches que ofrecían experiencias bastante diferentes con respecto a los actuales monoplazas y que, lamentablemente, no han regresado en esta entrega. Habrá a quienes no les importe esta pérdida, pero es innegable que más variedad no iba a hacerle daño a nadie. Además también desaparecen del videojuego las variantes cortas de ciertos circuitos que, de nuevo, solo le restan posibilidades a un título en el que se hubieran podido incorporar perfectamente —incluso sin añadir más coches o trazados— puesto que los cambios respecto a la edición del año pasado son mínimos.
El último punto negativo que le encuentro a este juego es el mantenimiento de las versiones antiguas de varias pruebas, a saber: el Circuit de Barcelona-Catalunya, el Circuito de Albert Park y el Circuito de Yas Marina. Estas tres localizaciones han sufrido ciertos cambios con vistas al presente año. Si bien las obras de los dos últimos trazados todavía no han finalizado en la vida real —por lo que entiendo que no se hayan incluido en el videojuego—, la reforma de la pista catalana concluyó hace varios meses. Esta, además, solo comprenden una única curva. Un pequeño pero para los fanáticos del deporte que, por otra parte, no empeora la experiencia general. Sobre todo teniendo en cuenta que, por fin, este año podremos disfrutar de varias de las pistas que se añadieron al calendario debido a la pandemia del COVID-19 y que, por limitaciones de tiempo, no pudieron ser incluidas en Formula 1 2020. Estas son las pistas de Ímola y Portimão, que debutaron el año pasado; y la de Jeddah, que hará lo propio esta temporada. Los tres circuitos se podrán descargar en el futuro de manera gratuita. A pesar de ello dudo que Codemasters actualice los trazados que han sufrido cambios, u otros que han ingresado en el calendario de manera repentina, como el Istanbul Park.
¿Y cuáles son los puntos positivos de Formula 1 2021? Lo cierto es que hay unos cuantos. En primer lugar he de destacar las pequeñas mejoras al modo de juego «Mi Equipo», en el que tendremos que construir una escuadra de Fórmula 1 e intentar besar la gloria con ella. Los cambios principales son dos: la posibilidad de fichar a pilotos históricos de F1 y, la más trascendental, pequeños eventos que truncarán el desarrollo de nuestro monoplaza. Un ejemplo podría ser: el simulador del equipo tiene problemas y hay una mejora de «software» disponible, ¿empleamos recursos en implantar esa mejora o ahorramos el dinero y rezamos porque no se estropee? No es una revolución, pero ciertamente añade frescura y variedad a las temporadas que disputemos como parte del gran circo.
El siguiente añadido amplía la experiencia de juego online: el «Modo Piloto» a dos jugadores. Básicamente es una ampliación del mismo modo que ya llevamos tiempo viendo en la saga, y que ahora nos permite competir en una temporada del Gran Circo junto con otro amigo. Nos ofrece la posibilidad de cooperar como compañeros de equipo o competir para marcas diferentes por el título de campeón del mundo. Este añadido me parece excelente, especialmente por la morriña que suscita en mí recordando las innumerables tardes jugando al Formula 1 06 con mi primo, y creyendo que podríamos plantarle cara al mismísimo Káiser. ¡Todavía hay más! El «Modo Piloto» recibe otra nueva variante en la que podremos encarnar a cualquiera de los deportistas en el punto del campeonato que deseemos, partiendo de los puntos del piloto y del equipo en esa ronda durante la temporada real. Sin duda si seleccionamos a Lewis Hamilton no será un camino de rosas como en años anteriores.
La última novedad es, sin duda alguna, la más reseñable de todas: la introducción de un modo historia —¡con cinemáticas y todo!—. El denominado «Braking Point» es la gran apuesta de Codemasters para esta entrega. Un modo de juego inaudito que nos sumergirá en la historia de Aiden Jackson, un «rookie» que debuta en la máxima categoría del automovilismo junto a Casper Akkerman, un veterano piloto. Si la docuserie «Drive to Survive» de Netflix sobre la Fórmula 1 acumula tres temporadas es porque a la gente le gusta. Aunque más que una docuserie calificaría a esta producción como una telenovela, en la que se descontextualizan los acontecimientos del «paddock» y de las carreras de F1 para brindarle al espectador un auténtico melodrama. Bastante en línea con los «shows» estadounidenses. Precisamente el nuevo «Braking Point» parece beber mucho del espectáculo televisivo, pues nos plantea una historia plagada de acción y disputas entre los compañeros. Así pues, durante el desarrollo de la historia se vivirán momentos de una tensión comparable a algunos acontecimientos reales, como el choque entre Sebastian Vettel y Mark Webber durante el Gran Premio de Turquía de 2010, o broncas equiparables a la que Toto Wolff le debió echar a sus dos pilotos después del Gran Premio de España de 2016. Desde luego la apuesta por el espectáculo es todo un acierto. A pesar de ello, «Braking Point» tiene un fallo de coherencia entre lo que ocurre en pista y lo que sucede durante las cinemáticas. Así pues, durante una carrera nos pueden plantear como objetivo terminar por delante de nuestro compañero de equipo que ocupa la séptima posición, y puede que hasta consigamos ganar la prueba. Pero en la historia este último hecho se obviará, y si nos tienen que espetar que no somos nadie, lo harán, incluso si acumulamos varias victorias en nuestro palmarés. En última instancia esta desconexión entre nuestros resultados reales y la trama pueden resultar desconcertantes y empeorar la sensación de los jugadores.
Novedoso, pero no revolucionario
Formula 1 2021 es un título enfocado a todos aquellos que quieran sentirse como Fernando Alonso —aunque conduzcan como Nikita Mazepin—: simple, directo, y sin muchas complicaciones. No estamos hablando de un simulador puro y duro como iRacing o Assetto Corsa, pero sí de un juego con el que puedes pasar el rato y divertirte conduciendo sin ser un auténtico experto. Esta nueva entrega introduce mejoras en el apartado de juego individual, que seguro podrán brindarte muchas horas de juego. A pesar de ello, la ausencia de los monoplazas cásicos y los circuitos cortos resta posibilidades de juego, aunque para algunos resulte insignificante al lado del correcto «Braking Point». Si no posees ningún título de Formula 1 y te interesa introducirte en la franquicia, ¿por qué no hacerlo con este? Si, en cambio, tienes alguno de los títulos más recientes, quizá deberías valorar personalmente si vale la pena desembolsar casi 60€ por un puñado de novedades.