¿Cambio de estrategia, o nada que mostrar?
De manera disimulada (a través de un representante de la compañía a la web de IGN) y dejando muchas puertas abiertas. Así se ha dado a conocer la decisión de Electronic Arts respecto a su participación en la edición del E3 de este año, que no ha sido otra que cancelar su propia conferencia, hasta ahora llamada “EA Play Live” y con un formato similar a los Nintendo Direct o los State of Play de Sony. Y aunque no cierran la puerta a realizar anuncios en las fechas en las que el resto de compañías desvelarán sus novedades para los tiempos venideros, lo que está claro es que podemos ir olvidándonos de una conferencia al uso por parte de los chicos de Andrew Wilson.
Ante la progresiva pérdida de influencia que ha sufrido el E3 con el paso de los años (siendo ahora ya más un periodo de fechas en las que las principales compañías de la industria del videojuego generaban anuncios y más anuncios, frente a la feria clásica que se celebraba en Los Ángeles, con esta tendencia empezando incluso antes del estallido de la pandemia), esta medida tampoco puede resultar sorprendente para nadie. Ahora bien, esto tendría sentido si no hubiera literalmente nada que enseñar. Quiero decir, no sería la primera vez que Electronic Arts se inventa un show de una hora de duración en torno a un único título (Star Wars: Battlefront, por ejemplo) y rellena el resto del tiempo con teletipos frecuentes del tiempo que resta hasta que se sirve el plato fuerte.
¿En serio Electronic Arts, supuestamente una de las mayores compañías del sector, no tiene material ni siquiera para ejecutar su propia conferencia?
Respawn Entertainment y sus proyectos basados en Star Wars, los proyectos de Codemasters (Electronic Arts también participa en el juego de adquirir estudios), Dead Space Remake, Skate 4, Dragon Age 4, el Need for Speed que está siendo desarrollado por Criterion, más las entregas deportivas que tocan como cada año… Muy mal se tiene que estar dando todo para que no puedan sacar un mísero teaser de cada cosa y hacer un recopilatorio apañado para estar presentes en la mayor “feria” del videojuego. Cierto es que lo más probable es que aparezcan en otras conferencias (muy probablemente las de Sony y Microsoft, asociando licencias a PS5 o Series X|S según corresponda), con tal de tener su ración de visibilidad. Pero muy verdes tienen que estar todos los proyectos que se traen entre manos (y que sepamos, claro está) para que matar moscas a cañonazos sea la mejor solución.
Sin querer entrar en terreno de especulación casi conspiranoica (como que esta decisión está motivada por una posible adquisición de la compañía por parte de otra, con todas las teorías apuntando a Microsoft), esto no hace más que reforzar la idea de que el E3 como lo conocíamos no volverá. Por costes, en primer lugar, pero también por exceso de sobreinformación. Y es que, hasta cierto punto, tiene sentido que algunas compañías quieran alejarse de la vorágine de novedades y Trending Topics de las primeras semanas del mes de junio para tener su pequeña ración de protagonismo. Ahora bien, con la retahíla de proyectos mencionados arriba, la situación a medio plazo para Electronic Arts, aunque solo sea de puertas para dentro, no tiene que ser precisamente la mejor.