El nuevo título de Assassin's Creed tendrá lugar en la Grecia Clásica
El pasado día 31 de mayo se filtró la que parecía ser la nueva entrega de la saga Assassin’s Creed, con el título de Assassin’s Creed Odyssey. Según la información filtrada a priori, el título se desarrollaría en la Grecia clásica, más concretamente durante la dinastía Flavia. De ser esto cierto, el título volvería, además, al sistema de hermandad, partiendo de la base asentada en Assassin’s Creed La Hermandad, pero implementándolo, ahora, de una forma renovada; más completa, más compleja, que nos permitiría reclutar y controlar distintas zonas griegas, así como provocar rebeliones en las regiones controladas por el Imperio Romano. Por último, se aclaraba que las zonas o regiones en las que se desarrollaría el juego serían Tracia, Acaya, Macedonia, Epiro, el Mar Egeo y el Mar Jónico.
Horas después, día 1 de junio, se anunció oficialmente la presentación del título, citándonos al próximo E3 y permitiéndonos descubrir aún más detalles del lanzamiento. Además de los datos ya mencionados, se aclaró que el juego volverá a optar por un sistema RPG, muy similar al que ya hubo en Assassin’s Creed Origins, pero con cambios en puntos determinados para potenciar dicha faceta todavía más. Eso no es todo, ya que la propuesta también incluirá, según apuntan, líneas de diálogo para elegir, algo muy característico de RPG actuales como The Witcher III: Wild Hunt o Mass Effect: Andromeda.
Entre Assassin’s Creed Syndicate y Assassin’s Creed Origins hubo dos años de diferencia de desarrollo, lo cual sentó muy bien a una saga, al menos hasta entonces, un tanto sobreexplotada. Según los datos filtrados, el siguiente título se podría lanzar este mismo año 2018, por lo que apenas habría pasado un año desde el estreno del anterior título. Esto es algo que no ha convencido a la mayor parte de la comunidad de fans, ya que si por algo empezó a desmoronarse la saga fue por el exacerbado ritmo de lanzamientos; por exprimir hasta su fertilidad a la gallina de los huevos de oro. Esperemos que, así, este lanzamiento no suponga el comienzo de otra sobrecarga más de títulos de la franquicia, que bastante ha sufrido como para volver a cometer los mismos errores.
Dejando a un lado a sus predecesores, la ambientación escogida para el juego parece muy acertada, especialmente si tenemos en cuenta el éxito cosechado por la anterior entrega, ambientada en el Egipto de Cleopatra; se trata de un movimiento alejado de la tendencia que tendían a seguir con el transcurso de la historia, y que, hasta el estreno de Syndicate, parecía moverse unilateralmente de forma frontal en el tiempo.
Por otro lado, resulta inevitable reflexionar más de la cuenta sobre el citado sistema de hermandad, puesto que si consiguen hacerlo igual de bien que con Brotherhood, podríamos estar ante un grandísimo juego que recoja el testigo que dejó el que para muchos es el mejor capítulo de la saga; la obra magna que supuso la cúspide del éxito de Ubisoft, y a partir de la cual todos los episodios acabaron desviándose, en mayor o menor medida, al fracaso.
El gran placer que nos proporcionaba poder reclutar a los miembros de la hermandad de asesinos era casi indescriptible – y solo los que hayan jugado tan espectacular juego sabrán de lo que hablo. Si Odyssey consiguiese imitar bien dicho sistema, mejorándolo en la medida de lo posible con nuevas mecánicas e ideas, está claro que sería muy bien recibido por los fans más veteranos. Pero no hay que olvidar que no se trata de revivir el juego de 2010, sino de incorporar ese aspecto tan importante a un juego muy evolucionado, cambiado drásticamente, y cuya fórmula se ha visto alterada por un factor RPG que podría funcionar, en colaboración con la susodicha posibilidad, a las mil maravillas.
La evolución de la franquicia ha sido enorme desde el lanzamiento de Origins, puesto que se ha pasado del sistema tradicional muy basado en sigilo a un sistema similar a la tendencia inaugurada por Dark Souls, perpetuada en el tiempo por propuestas como God of War. Pero esta etapa de evolución no termina aquí, puesto que, en Odyssey parece que habrá aún más pinceladas de RPG, y la introducción del sistema de elección de diálogos clarifica más esta tendencia.
Sobra decir que hasta el E3 no veremos nada, pero que a pesar de que tengamos bastantes datos aún pueden sorprendernos, y por supuesto eso esperamos.