Retrasando lo inevitable
El juego multijugador masivo online ATLAS, de los creadores de ARK: Survival Evolved, es retrasado al menos una semana. Fue uno de los videojuegos anunciados en The Game Awards 2018 que más expectativas ha generado. Tenía previsto su lanzamiento el día 13 de diciembre, y sus creadores han confirmado que se retrasa hasta el día 19 de diciembre.
Según el comunicado a través de Steam, el equipo “está tomando un tiempo extra para revisar cada parte de forma concienzuda“. Esto podría significar que han necesitado de tiempo para pulir detalles importantes pero cabe preguntarse si un proyecto tan ambicioso como ATLAS estará lo suficientemente optimizado. Recordemos que Wildcard Studios fueron los creadores de ARK: Survival Evolved, que en su lanzamiento tuvo graves problemas de bugs, errores, y sobretodo de optimización.
Lo que sabemos hasta ahora es que el juego está ambientado en una época de piratas con toques fantásticos como dragones, elementales y trolls. Podemos ver escenas de construcción de barcos, navegación, lucha en el mar, defensa en tierra de castillos contra criaturas, ciudades pobladas, mazmorras, búsquedas del tesoro, peleas de taberna y duelos piratas. Lo que nos deja con un buen sabor de boca ante tantas posibilidades. Sólo faltaría por saber cómo encajarían todos esos elementos entre sí, el sistema de progresión y la jugabilidad. Y es que somos partidarios de ante todo, un videojuego debe ofrecer una experiencia persistente y divertida que motive al jugador. A veces una muy buena temática y una componente social fuerte no son suficientes para sostener un videojuego, como es el caso del conocido Sea of Thieves. Ahora este nuevo juego: ATLAS, a juzgar por las diferentes situaciones, promete mucho, tal vez demasiado sin saber si tiene algún sentido jugable cada uno de los aspectos que hemos visto.
Sea of Thieves dejó caer mucha parte de la experiencia disfrutable en la compañía del jugador. Si un juego sólo resultaba divertido por jugar con amigos, tal vez cuestione al propio juego y lo divertido sea jugar con tus amigos, independientemente del videojuego. Apostó por unas mecánicas muy abiertas con exploración que dotaban al jugador de mucha libertad pero al abarcar todo por igual carecían de rejugabilidad alguna. Aún con el factor de otros jugadores en contra (con un ingenioso sistema de matchmaking) y de criaturas marinas que creaban nuevas situaciones en las misiones, seguía siendo un juego poco rejugable y carente de propósitos jugables lo suficientemente robustos para ser jugado en el tiempo.
Si comparamos ATLAS con este juego, veremos que es significativamente más ambicioso, menos conservador y más desafiante, lo que puede ser enriquecedor para el juego si todas esas posibilidades siguen una pauta evolutiva en el jugador y no responden únicamente al PvP.
Si por el contrario nos encontramos ante una hilera de modos para PvP que no conllevan nada persistente, solo estaremos ante una versión más amplia y vitaminada de Sea of Thieves. Está claro que para evaluar el juego en su medida, es necesario conocer en profundidad cómo funcionan todos estos elementos. Nos hubiera gustado conocer en detalle todos estos elementos pero sólo la falta de información revela que tal vez no sea lo que todos esperamos. De cualquier forma, solo nos queda esperar al 19 de diciembre para salir de dudas. ¿Nos convertiremos en auténticos piratas o será otro naufragio más en el mar de videojuegos?