Las mejores setas que he probado en mi vida
Hace poco menos de un mes llegaron a nuestras tiendas digitales y físicas las versiones para 3DS y Switch de Captain Toad: Treasure Tracker, un título que, siguiendo los pasos de Bayonetta y Donkey Kong, ha decidido salir del catálogo original de Wii U para explorar nuevos horizontes. Y lo cierto es que lo ha hecho en un momento muy apropiado, casi idóneo; en una temporada de verano considerablemente relajada, que muchos estamos aprovechando para rejugar clásicos (¿he oído maratón de Kingdom Hearts?), para darle una oportunidad a todos esos títulos que se nos escaparon a lo largo del pasado 2017 o, en el mejor de los casos, para meterle horas como un condenado a Octopath Traveler. En pleno verano toda novedad se agradece, más aún cuando toca estar ante un trabajado port de uno de los juegos más originales y atrevidos que Nintendo ha lanzado en los últimos cinco años, que se dice pronto.
Treasure Tracker es una propuesta muy especial. Una joyita no apta para todo el mundo, algo corta, que, sin embargo, agradece su compra al jugador brindándole un amplio abanico de más de 80 niveles, todos ellos, por supuesto, con una personalidad enorme y con una calidad intachable. No es un juego que destaque por la complejidad de sus puzles, ni por las intrincadas mecánicas que poseen sus fases de plataformeo 3D, pero sí que brilla con luz propia su variedad de situaciones y su apartado artístico, conformando una aventura excelsamente agradable que realmente apetece jugar en cualquier momento.
Dada su naturaleza, además, nos encontramos ante una aventura muy fresquita dominada por el ingenio, por el uso de la materia gris, que no tiene grandes problemas a la hora de alejarse de la acción y del estrés que esta en ocasiones supone. No por ello nos encontramos ante un conjunto exento de ella, pues siempre hay un poquito de vidilla esparcida por los niveles, tratándose de un ingrediente más dentro de una fórmula que, ciertamente, funciona a las mil maravillas. Eso sí, no tratéis de explotarla durante demasiado tiempo de corrido, pues su gracia se acabará diluyendo al par de horas de encontrarla.
Desde luego, Captain Toad no protagoniza un juego ideado para las largas sesiones de juego, sino más bien para las partidas cortas. Precisamente, quizás sea eso por lo que se nos antoja tanto jugarlo ahora, en verano, donde muchos, entre escapada y escapada, no contamos con el suficiente tiempo como para comernos un RPG de la talla de The Witcher 3: Wild Hunt. Muchos otros, por suerte o por desgracia, sí os encontraréis ante dicha situación, a los que os guardo un pequeño consejo: intercalad los niveles y la diversión que Treasure Tracker puede ofreceros con otros juegos de mayor envergadura narrativa, tomándoos los mundos protagonizados por el bueno de Toad como un descanso argumental. Lo gozaréis mucho más.
Y es que el título que hoy tenemos entre manos no deja de ser eso, un descanso. Un oasis en mitad de un desierto de lanzamientos, que no busca ser una obra maestra, que presenta mecánicas realmente frescas y que, por si fuese poco, ha decidido llegar a nuestras eShops a un precio recomendado de 40€. Estoy de acuerdo con vosotros: no, no es un juego especialmente barato, menos aún para tratarse de un port, pero dada su rejugabilidad y su factura técnica, tampoco lo considero caro. Al fin y al cabo, juegos como All-Star Fruit Racing, mucho menos divertidos, innovadores y redondos, presentan precios similares (lo cual, como dije en su review, es bastante criticable, inhibiendo cualquier tipo de valimiento hacia los indies).
Al asequible coste debemos de sumar la disponibilidad de una demo que ya podéis encontrar en las tiendas digitales, y mediante la cual podréis catar por vosotros mismos la calidad de la entrega, experimentando con sus mecánicas y con su problemática cámara. Es algo que os recomiendo plenamente antes de lanzaros a la piscina, pues, como bien dije antes, no nos encontramos ante un juego para todo el mundo, independientemente de lo que a priori pueda parecer, pero sí ante uno que todos pueden probar, juzgar y valorar. Eso sí, si con todo lo que he comentado en este artículo no he conseguido que vayas corriendo a la eShop a probarlo, casi mejor que no te tomes la molestia de volver a saber de él. Definitivamente, Treasure Tracker no es para ti.