Un sistema de objetos refinado para esa versión
Tras el descalabro de Activision-Blizzard con el anuncio de Diablo Immortal, este verano tendrá un encuentro interesante con su afición en una de sus franquicias más conocidas: World of Warcraft. Ya que se lanzará la versión Classic que permitirá regresar a los tiempos de la versión 1.12. Blizzard ha confirmado recientemente que el sistema de objetos será idéntico al de dicha versión con todo lo que eso implica.
Esto afectará tanto al sistema de PvP como al sistema de PvE, teniendo en cuenta las estadísticas y características de los objetos. Aunque se incluirán ciertas correcciones que afectaban a estas primeras versiones ajustándose progresivamente hasta la versión 2.0 del juego.
La idea será partir de la versión 1.12 pero no seguirá la misma línea que el original, ofreciendo una versión ligeramente distinta a la del 2005 que si bien, estará lo más refinada posible se intentará mantener fiel a la experiencia original, ya que consideran que también es la más interesante y divertida para los jugadores veteranos y nostálgicos.
World of Warcraft es pionero en nuevos horizontes
World of Warcraft es un juego que ha marcado un antes y un después en la historia de los videojuegos. Y su larga duración lo hace pionero en el descubrimiento de nuevas problemáticas que nunca se han dado antes en un videojuego. Hay que ser conscientes de que el WoW tiene un problema de base que se conoce desde su existencia: expandir el contenido PvE a largo plazo impide la llegada de nuevos jugadores. Lo curioso, es que esta misma problemática forma parte de los denominados ‘juegos de servicio’. Por lo que, si en teoría los juegos de servicio están hechos para durar 10 o más años, estaríamos ante un problema cuya solución interesaría a todos los videojuegos en tendencia de hoy. Desde Blizzard, se plantean reducir el números de niveles a la mitad, lo que supone contraer todo el contenido de las distintas expansiones o hacerlas opcional, lo que en cierto modo privaría a los nuevos jugadores de conocer la historia del videojuego. Esto es un problema que no se ha abordado antes, pero en vista de que no ha salido ningún WoW-killer, la mejor opción para Blizzard es seguir manteniendo su juego y atraer a nuevos jugadores. Existen mecánicas que extienden el endgame como ya hizo con Diablo III, pero en cierto modo no suponen una continuación del juego sino más bien un alargamiento o estiramiento que no ofrece nuevo contenido de verdad. La clave de este asunto lo podría tener juegos como Path of Exile, donde los chicos de Grinding Gear Games han demostrado bastante ingenio a la hora de elaborar temporadas y nuevo contenido para el juego. También podría estar en el comienzo de muchos juegos competitivos y para móviles, que ofrecen un progreso bastante adictivo con lo que atraer a nuevos jugadores de forma más sutil. La cuestión de fondo es que WoW no se cimentó en esa larga duración, lo que supone una oportunidad para construir un juego de servicio en base a ese criterio y no pretender lanzar un juego de servicio en escaso tiempo y con la misma filosofía que llevamos años atrás.
Wow Classic será una grata experiencia para todos aquellos que añoren los viejos tiempos y un escenario de prueba para los nuevos jugadores. Muchos de los jugadores del WoW, actuales, opinan que debido a su dureza y el escaso tiempo de juego que disponen esos mismos jugadores, podría durar poco tiempo. De hecho, se teme que la puesta en marcha de Betas públicas/privadas podría ser contraproducente ya que Blizzard prodría acabar con el hype y los jugadores pasasen de comprar su acceso . Se rumorea que este campo de pruebas (el número de jugadores y ventas) podría ser el indicador de Blizzard para continuar con el juego principal o llevarlo por otros caminos. En mi opinión, creo que Blizzard no esperaba ese arraigo hacia ese juego y teme que todo lo que no siga el mismo camino que WoW pueda abocarse al fracaso como recientemente le ha sucedido a Valve con Artifact. En ese sentido, creo que si teme eso Blizzard es porque no tiene claro realmente cuál debería su filosofía en sus próximos videojuegos, lo que a mí me resulta preocupante por los tiempos en los que estamos. Es evidente que Blizzard se ha dormido en los laureles y hay un retraso considerable, no sabemos si esto hará virar a Blizzard hacia un fan-service sin sentido o a recuperar la esencia de sus videojuegos originales en otros títulos. Para bien, o para mal, queda esperar a ver la acogida de Wow Classic este verano y ver si realmente es una experiencia merecedora de todo nuestro tiempo de juego.