A la vuelta de la esquina
El E3 de este año vino cargado de novedades de alto nivel, pero tras las primeras filas se encuentran pequeños juegos extremadamente interesantes que pueden hacer la delicia de los paladares más finos. Entre ellos se encuentra el videojuego español Blasphemous, creado por The Game Kitchen, y candidato a entrar en la lista del maravilloso software hecho en nuestro país.
Si no conocéis este indie estad atentos a la propuesta: imaginad un juego inspirado en la Semana Santa de Sevilla y el arte religioso, donde toda esa estética adquiere toques de lo más macabro, creándose el caldo de cultivo perfecto para ser un metroidvania con acción y un estilo de juego hack and slash. Este curioso cóctel llamó la atención en su campaña de financiación en Kickstarter no sólo por tan curiosa idea, sino por un apartado estético de lo más exquisito gracias a su preciosista pixel art lleno de fluídas animaciones. Dicha campaña fue un éxito arrollador en muy poco tiempo: de los 50.000 dólares iniciales que se pedía para el desarrollo consiguieron más de 333.000 con casi 10.000 patrocinadores, siendo así una de las campañas más exitosas de la plataforma de crowfunding.
Tras algunos años en desarrollo y varias development build, a lo largo de este E3 por fin tuvimos un trailer final (o al menos uno de los últimos), generosos gameplay y una fecha de salida sin concretar pero que se anunciará pronto. Todo indica que su llegada a nuestras consolas y PC está al caer.
En la piel del Penitente
Parece que por el camino el juego ha sufrido algunos cambios que le han sentado muy bien, pero su idea inicial está prácticamente intacta. Nos pondremos en la piel de El Penitente, el ¿héroe? de esta aventura, que como único superviviente de la masacre de la Hermandad del Lamento Mudo, deberemos liberar a la tierra de Cvstodia de una maldición que condena al mundo a un ciclo de muerte y resurrección sin fin. Para ello tenemos enfrentarnos a los monstruos y seres que habitan en esas tierras tan obsesionadas con tan desquiciada religión, ayudándonos de diferentes habilidades, reliquias y plegarias que incrementarán nuestras competencias a lo largo de la aventura. Parece que con ese sistema se ha incorporado un extenso inventario y árbol de habilidades destinado a enriquecer la experiencia del jugador y ayudando a personalizar nuestro estilo de juego. Eso sumado a un estilo no lineal y enfocado a la exploración puede dar como resultado un título con altas probabilidades de rejugabilidad.
La sensación general es que se ha elevado el nivel de las licencias creativas a un nuevo punto, uno que ya de por sí estaba bastante alto.
La violencia también campa a sus anchas más que nunca. A pesar de que al momento de escribir estas líneas aún no se le ha dado una calificación para edades (cosa cuanto menos simpática y curiosa), se ve sobradamente que han querido hacer algo muy enfocado a lo adulto y que encaje perfectamente con el horror que propone. Ahora podemos encontrar un apartado más explícito, recreándose en una especie de fatalities para terminar con nuestros enemigos de la forma más brutal posible, dignas de un alumno aventajado y retorcido de Mortal Kombat. La sensación general es que se ha elevado el nivel de las licencias creativas a un nuevo punto, uno que ya de por sí estaba bastante alto al enfrentarnos a magníficos jefes como, por ejemplo, una diabólica criatura reposando en brazos de La Piedad de Miguel Ángel o un Niño Jesús gigante de lo más sanguinario. Ya veis que no estamos ante algo baladí, y el juego podría tener un buen calado entre la comunidad. Aquellos que venían de juegos como Hotline Miami o Mother Russia Bleeds pueden encontrar en Blasphemous el juego que recoja el testigo de éstos.
¿Cuánto más habrá que esperar para probar esta genialidad? Esperemos que salga en los próximos meses tal y como se había planeado, porque ya somos muchos los que estamos reservando un espacio en nuestras plataformas. Porque sí, saldrá en todas las habidas y por haber: PS4, Xbox, Nintendo Switch y PC (para Windows, MacOS y Linux). No habrá excusa para no hacerse con una copia y adentrarnos en uno de los indies más interesantes de los últimos años.