Nuevo caso de estudio
Todos estamos familiarizados con el famoso review bombing. Ese pasatiempo de algunos usuarios de puntuar mal un juego sin tener ningún tipo de motivo de peso, tan solo la simple satisfacción de sabotear dicho título, e impedir de esta manera que otros jugadores tengan la oportunidad de probar el juego y decidir por sí mismos si están de acuerdo o no con esa “opinión popular”. Y no nos engañemos: es obvio que es muy complicado crear algo que sea del agrado de todo el mundo, más teniendo en cuenta que vivimos en una sociedad que cuenta con miles de opciones para escoger y que cada persona tiene su opinión personal. Pero eso no quita que haya ciertas cosas que suelen ser apreciadas por gran parte de la población.
Esto se plasma perfectamente en el mundo de los videojuegos. Hay juegos que son criticados positivamente, tanto por profesionales como por meros jugadores, y se convierten en grandes éxitos. Pero incluso algunos títulos tan bien criticados también se han convertido en víctimas de este review bombing, como es el caso de The Last of Us Part II o Death Stranding. Dos juegazos que al parecer no han sido suficientes para algunos usuarios, quizás porque muestran historias que no estamos acostumbrados a ver y a las cuales no se les quiere dar la oportunidad.
Balan Wonderwold es el último juego en sumarse a esta moda. Pero con una particularidad destacable: en vez de recibir malas notas, hay cientos de usuarios que lo están puntuando con un 10. Es decir, un review bombing invertido. El juego puede ser divertido, entretenido y de calidad, pero que tantos perfiles consideren que es perfecto me huele un poco raro. (No lo sé Rick, parece falso). Más si nos fijamos en los comentarios de las redes, en la poca recepción por parte de la prensa y en los usuarios que han publicado dichas críticas, ya que muchos de ellos parecen ser bots o perfiles recién creados y con muy poca puntuación.
No es la primera vez que un título recibe este tipo de crítica tan positiva por parte de los usuarios y que suele chocar con las críticas más profesionales. Sucedió algo parecido con Left Alive, el spinoff de Front Mission para PS4 y PC. El juego recibió críticas bastante neutras por parte de la crítica de Metacritic, quien consideraba que podría haber sido bastante mejor. En cambio, en las puntuaciones de los usuarios tiene una media de 8,5.
Estos hechos no son más que otra muestra del inmenso poder que tiene el usuario cuando se trata de evaluar un juego. No importa qué tan bueno o malo sea un título, si los usuarios deciden que no les ha parecido suficiente o, por el contrario, que ha superado sus expectativas con creces se asegurarán de que eso quede plasmado. Y si tan solo les apetece valorar un juego con cierta puntuación porque les apetece sabotearlo o glorificarlo, tampoco perderán el tiempo para compartir su opinión con el resto de los gamers.
Y también deja claro que, si bien es cierto que las críticas que se le dan a un sitio, un juego o una película tienen cierta repercusión en lo que podemos esperar de ello, siempre es importante decidir por nosotros mismos si queremos probar dicho elemento. Tan solo de esta manera podremos formar nuestra propia opinión, que al fin y al cabo es la que de verdad importa.