Vale ya, ¿no?
No, el título no es una exageración: cada vez estoy más convencido de que Nintendo odia los videojuegos. No me refiero a crearlos, por supuesto, eso se les da de lujo; me refiero a disfrutarlos. Realmente esto se puede aplicar a muchas desarrolladoras, pero Nintendo es la más propensa a ello. Su afán por borrar y reescribir la historia del medio es fascinante, y en vez de admitir algún que otro desliz prefiere esconder incluso los triunfos debajo de la alfombra para colarte lo que quiera. Ninguna empresa de videojuegos es una ONG: pueden tener alguna que otra fundación o apoyar pública y económicamente a ciertos movimientos sociales, pero parece que cada vez más el poder jugar y disfrutar es lo de menos. Uno de los pilares fundamentales de Nintendo es tener la diversión como prioridad, y eso puede gustar más o menos dependiendo del consumidor, pero es un hecho objetivo. Lo que también es un hecho objetivo es que su concepto de diversión está a veces bastante alejado del de los usuarios.
Las eShop de 3DS y Wii U morirán el año que viene. A diferencia de Sony han tenido a bien avisar con más de tres meses de antelación, pero la realidad sigue siendo la misma: se van a perder muchos juegos que no salieron en formato físico. Aquí entra el conflicto de intereses y pasarse la pelota de la responsabilidad de hacer que esos juegos sigan siendo accesibles: para el usuario, la culpa es de Nintendo por no hacer retrocompatibles sus juegos como la competencia; y para Nintendo, es cosa de los desarrolladores que porteen sus juegos a plataformas actuales y de los usuarios por no haber adquirido esos productos a tiempo. Ya he hablado varias veces de lo importante que es la preservación del medio y que decirlo está muy bien, pero lo que se necesita es actuar, y se están dando pasos hacia delante con las bibliotecas que permiten que tengas el juego durante varias semanas.
Hay quien dice que las bibliotecas están muriendo y hasta cierto grado es verdad que su uso ha descendido drásticamente, pero se han adaptado al préstamo digital permitiendo el acceso a millones de ebooks y películas. Con los videojuegos es distinto, ya que la distribución de software es muy diferente, pero a la vez que escribo esto recuerdo que Archive hace uso de emuladores que funcionan en el navegador para poder jugar a los títulos que tiene almacenados. En el comunicado del cierre de las tiendas Nintendo expresaba lo importante que es poder jugar a títulos antiguos y recuperar esos momentos grabados a fuego en nuestra memoria, incluso reencontrarte con aquellos ya olvidados. En el siguiente párrafo, inmediatamente justo debajo, te dicen que no tienen planes de traer esos títulos a plataformas modernas.
Estamos en el año de nuestro Señor 2021. No me hables de la importancia de la preservación si no vas a mover un dedo por lo tuyo. Ya no vivimos en una época en la que portear sea la única forma viable de jugar, y para muestra tienes los emuladores que te puedes bajar en un par de clicks para jugar a lo que sea. La Video Game History Foundation ha dicho lo que todo el mundo piensa: qué pretendes que hagamos una vez que cierren las tiendas, ¿cruzarnos de brazos? Por supuesto que vamos a piratear, porque ya no queda ninguna excusa (y sí, digo excusa) para que no obtengamos esos juegos de forma ilegal. Pertenecéis a la Entertainment Software Association, un lobby que, entre otros muchos en Estados Unidos de la mano de las editoras, quieren cargarse el acceso público y gratuito al contenido con copyright. Marcarse un SGAE pero a lo bestia, incluyendo copias físicas obtenidas legalmente. Ya no es una cuestión de tecnología, es una cuestión de intereses puramente monetarios.
Tú, Nintendo, que tanto te congratulas del primer Super Mario Bros. poniéndolo por todos los rincones que puedes, no me digas que te preocupas por nosotros y por nuestros recuerdos. Los consumidores no somos idiotas, y lo que más nos revienta es el por qué estáis haciendo esto. No vais a hacernos creer que no ha existido ninguna portátil hasta la Switch o que parasteis con Nintendo 64 hasta ahora. No entiendo cómo en un año, a no ser que mováis el culo, no va a ser posible comprar de forma oficial ningún juego de Game Boy, una de vuestras consolas estrella. Vosotros que ofrecíais un montón de títulos con el sistema de Consola Virtual, ¿ahora qué quieres que hagamos? Si tanto te preocupa nuestra infancia, ¿qué pretendes conseguir enterrándola?
En nada van a encerrar a un equipo de hackers por piratear la Switch y has estado persiguiendo las webs de ROMs y tumbando una tras otra durante años. Si no vas a vender más esos juegos es porque no te importan, y no te digo que los des gratis: simplemente déjanos jugar en paz. Y esto no va solo por Nintendo: si tu consola ya no tiene soporte alguno, piratéala y disfruta. Si acabas descubriendo un juego que te cautive o recuperando otro olvidado, compra otro de la misma desarrolladora para apoyarlos. Visto lo visto, va para largo.
Pero hey, te puedes hacer un grafiquito super chuli con los juegos que más te han gustado de estas consolas. ¿A que Nintendo es la pera?