Infernax

Aprende, David Cage

Infernax es un juego hecho con muchísimo amor, y se nota de lejos. La gente de Berzerk Studio no pretende revolucionar el medio porque no lo necesita, su objetivo es otro distinto. Lo que busca es hacer un juego divertido pero proponiendo a su vez un reto nada despreciable, y lo consigue con creces. Nos encontramos con un metroidvania 2D que no se avergüenza de mostrar sus inspiraciones, tomando elementos de aquí y allá para formar un conjunto que dura lo justo y necesario para no resultar cansino ni corto. Tendremos que atravesar un mundo invadido por demonios y criaturas infernales, atravesar varios castillos para obtener objetos y derrotar a los jefes de cada zona para poder desbloquear la batalla final. Sin embargo, la cosa no queda ahí, ya que dependiendo de nuestras acciones y decisiones llegaremos a un final u otro y desvelaremos algunos de los secretos de su mundo.

Cómo pega la calima

Al comenzar tendremos dos modos: el clásico, con puntos de guardado en pueblos y las entradas de las mazmorras, y uno más casual, en el que conservaremos parte de la experiencia y el dinero si palmamos. Habiendo jugado en el modo clásico el reto era asequible, aunque no negaré que he tenido ganas de morder el mando varias veces, pero si se nos atasca podremos cambiar al modo casual en cualquier momento. También hay varios códigos que relajan la dificultad del juego si hay una parte muy muy específica que se hace bola, y me parece una buena decisión si lo único que necesitas es atravesar un salto demasiado puñetero. La dificultad viene sobre todo por la posición de los enemigos, que están puestos a mala baba para que te pienses dos veces si sale rentable o no esa experiencia extra.

Puedes elegir entre armadura, armadura+1 y armadura+2.

El ciclo de juego es muy sencillo: atraviesas las zonas entre pueblos y mazmorras matando enemigos para conseguir dinero y experiencia; llegas al pueblo y compras hechizos y equipamiento (es más una mejora del arma y armadura que otra cosa, no hay personalización); pasas por la zona de guardado e inviertes la experiencia en hacer más daño, tener un extra de vida o de maná para lanzar hechizos y vuelta a empezar. Cada cierto tiempo encontraremos un castillo en el cual obtendremos habilidades nuevas para llegar a otras zonas del mapa, derrotaremos a un jefe y si hay suerte destruiremos una de las 5 esferas de poder. Entre castillo y castillo podremos conseguir dinero y hechizos a través de las misiones secundarias, que son muy variadas y suelen requerir que busques a alguien, encuentres una zona concreta o directamente revelar subtramas interesantes.

También hay eventos que suceden dependiendo de si es de día o de noche, por lo que conviene estar atento y hablar con todo el mundo para irlas haciendo a nuestro ritmo o incluso las completemos sin querer. En esto influyen las decisiones, las cuales pueden desbloquearnos unas misiones u otras sin que lo sepamos, o incluso no tener ni idea de que las estamos tomando y llevarnos una sorpresa.

El mundo de Infernax es pequeño pero está repleto de secretos. En la primera partida desbloqueé un final pensando que había completado casi todas las misiones para después abrir el bestiario y ver que solo me había encontrado a un 60% de los enemigos. Quizá sea este uno de los puntos más flojos, el de los enemigos, que llegando a sorprender en un principio acaban repitiendo patrones unos y otros y puede llegar a cansar. Quitando algunos exclusivos de los castillos, muchos se basan en espadas, hachas y lanzas, tirarlas a ritmos y alturas distintos y que vayan pegando saltos para que te cueste más darles. Los jefes son las verdaderas estrellas, con pocos movimientos cada uno pero con diseños y mecánicas más variados. Los ataques nos pueden llegar a quitar mucha vida y desconcentrarnos, aunque el periodo de gracia al darnos puede volverse una oportunidad para partirle la cara todo lo que podamos. Sin embargo, no costarán muchos intentos, ya que suelen estar al final de cada castillo y no estaría muy bien llegar allí sin apenas vida.

Nuestro set de movimientos es el mismo durante todo el juego con alguna habilidad que otra. Estas habilidades no se limitan simplemente a abrirnos caminos por los que antes no podíamos ir, sino que nos pueden ayudar en mayor o menor medida a la hora de combatir. Por ejemplo: obtenemos la habilidad de romper ciertos bloques del entorno y asimismo podemos repeler proyectiles si los golpeamos en el momento adecuado. Al ser un juego medianamente corto y bastante lineal, concentrar en esencia dos poderes en uno ayuda a que sientas que no solo progresas, sino que te vas haciendo más fuerte. Comienzas teniendo miedo de unos ojos flotantes y acabas arrasando a tu paso porque sabes cómo moverte, cómo esquivar y qué golpes recibir. El plataformeo no es muy preciso y en dos o tres pantallas concretas puede desesperar, pero llegué al jefe final y sí, me costó varias veces y sé que podría haberlo hecho mucho mejor, pero fue cargármelo y soltar toda la rabia acumulada. Luego está lo de que hay distintos finales, zonas secretas y muchos más retos, y me lo pienso reventar de arriba abajo. El juego, como ya he comentado, no se hace muy largo ni muy corto, pero si vas a tiro hecho sin prestar atención a las secundarias puedes pasártelo en un día sin demasiado problema.

Por cierto, la banda sonora es, simple y llanamente, una absoluta brutalidad. Compuesta por Jules Conroy (FamilyJules), Jason Letourneau (Tryptique Audio) y Olivier Couillard, hace que cada zona se sienta completamente diferente pero con un sabor familiar exquisito.

Un juego que no para de dar, una y otra vez

Infernax no va a ser el mejor metroidvania del mundo, no destaca por un plataformeo agresivo y acabas siendo una máquina de reventar cráneos. En mi caso, con un hechizo hacía que fuera siempre de noche porque me daba igual tener más enemigos, me los zampaba sin problema y conseguía un extra de experiencia. Infernax es un muy buen juego, con sus cosas (nadie es perfecto) pero sólido de arriba abajo y con un carisma brutal. La dificultad está muy bien balanceada y sabe cómo apretarte las tuercas como para que sepas que al próximo intento llegas al jefe fijo, es un pique cómplice que no busca amargar ni servirte la victoria en bandeja. Si lo que estás buscando es un juego de acción y plataformas más centrado en descubrir su mundo que en tardar 5 minutos mirando qué te vas a equipar, este es tu juego. Eso sí, cuidado con el gore, es un juego de pixel gordo pero si no estás acostumbrado puede llegar a ser un pelín desagradable. Por cierto, está traducido al español y a la perfección, todo un gustazo.

Esta crítica se ha realizado con un código de descarga para PC cedido por Dotemu.