El fin de una era
Días duros para el pasado (y hasta cierto punto presente) de posiblemente la saga de shooters en consola más influyente en el género hasta la fecha, Halo. Hace apenas unos días tuvo lugar el anuncio que daba a conocer que los servidores que daban vida a los modos online de los títulos originalmente lanzados en Xbox 360 llegaban a su fin, y con ello, los modos multijugador y demás elementos dependientes de los mismos, se apagan. El fin de una era, ni más ni menos.
Online services for legacy Halo Xbox 360 titles have been discontinued. The affected games will remain playable indefinitely, but some experiences will be impacted.
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— Halo Support (@HaloSupport) January 13, 2022
Puede que no fuera la saga que más números moviera, pues le tocó competir con pesos pesados de su mismo género como Battlefield o el dominante Call of Duty, pero cierto es también que la evolución de estas no podría entenderse sin la obra de Bungie, que más tarde recaería en manos de 343 Industries con el desarrollo y publicación de Halo 4, allá por 2012, cumpliéndose (en unos meses) 10 años de dicho lanzamiento. Y aunque tras el divorcio entre Bungie y Microsoft, a ninguna de las partes le ha terminado de ir tan bien como podría haber soñado (Halo y Destiny han sido grandes obras, en lo que al videojuego respecta, y económicamente muy rentables, para los inversores que siguen inyectando dinero a sendos estudios), solo Halo 4 es “un extraño” en esta etapa que se acaba.
Y por más que esta noticia tuviera que llegar algún día (y probablemente gracias a la retrocompatibilidad ofrecida por Microsoft para Xbox One en su día, y Xbox Series X|S en la actualidad, con títulos de consolas previas haya podido estirarse durante algunos años más), no deja de ser un impacto emocional duro, ya que la base de jugadores de estos juegos en estas versiones concretas tendía ya a lo residual. Teniendo en cuenta el excelente trabajo realizado con Halo: The Master Chief Collection, no había motivo real para seguir empleando estas versiones, y por la existencia de esa misma recopilación, tampoco puede hablarse de que estos contenidos se pierdan para siempre. La conservación (bajo pago, eso sí, aunque merecido por otro lado), por una vez, no es el mayor de los problemas.
Sí lo es el hecho de que la primera generación diseñada por completo con el juego online y los servicios a través de Internet se apaga. Nintendo y sus funcionamientos autónomos aparte (con Wii habiendo sido descontinuada en todos los sentidos mucho antes que sus coetáneas, y con Wii U, su sucesora, apuntando al mismo camino más pronto que tarde), Halo en Xbox 360 era, más allá de un icono de la industria, un reclamo cultural especialmente en EEUU, y ahora, se va. Sí, las campañas seguirán estando disponibles, y la épica historia del Jefe Maestro podrá ser disfrutada una y otra vez, pero las partidas multijugador no vuelven.
Y ante un hecho inamovible, solo queda pensar qué será lo siguiente
¿Los servidores de los Call of Duty de esta misma época? ¿Overwatch, una vez salga (si llega a materializarse) su secuela, por ponernos en un ámbito más actual? ¿Steam o Epic Games retirando juegos masivamente, por ser algo más catastrofistas? Sinceramente, más allá de miedo por perder nuestros juegos, me da vértigo la sensación de paso del tiempo que, más allá de a nivel personal, está viviendo la industria del videojuego, sin que apenas nos demos cuenta. Porque, por más que muchos de nosotros no viéramos los primeros videojuegos, sí hemos visto los primeros que no vamos a poder volver a jugar (al completo).