Otra adaptación frustrada

Muchas franquicias han intentado dar el salto del mundo del videojuego al cine, y para bien o para mal, el resultado de la mayoría ha quedado en un fracaso rotundo, tanto a nivel de crítica como de taquilla y recepción por parte del público, siendo Pokémon una de las pocas licencias que sigue lanzando largometrajes basados en sus juegos (y su serie) de forma más o menos regular. En los últimos años, ha habido múltiples rumores de todo tipo de videojuegos (desde Minecraft a Bioshock) que tenían planeado su salto a la gran pantalla, y que se frustraron en medio del camino, por diferentes causas. Ayer mismo, a través del portal VG247, se dio a conocer el motivo por el que Metro 2033 no llegó a las salas, y es que el guionista encargado de la adaptación, F. Scott Frazier, intentó americanizar la obra de Dmitry Glukhovsky trasladándola desde Moscú a Washington DC, cambiando por completo la ambientación y, en palabras del autor original “no iba a funcionar”.

Dmitri-Glukhovsky

Entre los motivos para soportar su afirmación, recalca que muchos de los personajes (o grupos de ellos) del ambiente original, no hubieran encajado bien, como los nazis o los comunistas, además de los enemigos del juego, los Oscuros, que hubieran sido reemplazados por seres que poco o nada hubieran respetado la idea original (eliminando por tanto todo el trasfondo de la especie respecto a la humana) y lo hubiera convertido en una historia más genérica, algo que Glukhovsky no quería para su obra.

Se apoya, además, en el hecho de que tanto los libros como los videojuegos han vendido bien a nivel mundial y concretamente, bien en EEUU, por lo que el “mito” de que los consumidores americanos prefieren productos ambientados en su continente o país no encajaría en este caso. Además, la visión postapocalíptica del país ya ha sido tratada en múltiples ocasiones, y el público puede encontrarse ya saturado de ello, por lo que un cambio de aires únicamente podría beneficiar al producto final.

Metro ExodusEntre otros dilemas que suelen aparecer cuando hablamos de adaptaciones al cine, además del reparto de actores y detalles similares, es la propia intención de realizar una adaptación del libro (o videojuego en este caso) o bien ambientar el film en el mismo universo, pero expandirlo en vez de limitarse a narrar una vez más los mismos hechos que ya conocemos sobre Artyom, Hunter y el metro de Rusia. Aunque los detalles de la cancelación de la película original datan del año 2012 (el juego llegó en 2010 a PC y Xbox 360, mismo año de la publicación del libro en EEUU y 5 años después respecto a Rusia), Glukhovsky no se cierra a una posible adaptación cinematográfica de Metro Exodus, aunque dependerá del éxito del nuevo título de la saga y del plan de adaptación que le ofrezcan.

No obstante, lo cierto es que cualquier entrega de la saga podría prestarse a una buena adaptación al cine, aunque, de ser así, – al menos a nivel de trama – me gustaría que tomasen los libros como referencia, ya que, en parte por las limitaciones narrativas del medio, se pierde parte de la trama y de los detalles del mundo en el que vive Artyom, muy diferente al actual (por lo que tal cantidad de información es importante para darnos una visión adecuada del contexto). Viendo que 2019 parece que va a ser un año con gran cantidad de películas basadas en videojuegos (por lo pronto Detective Pikachu y Sonic), no me importaría ver a Metro Exodus en la lista, ya por curiosidad de qué son capaces de hacer con un universo tan rico e interesante como es el de la saga, así como varían la narrativa respecto a los juegos (que tienen una gran carga en este sentido) y qué consiguen transmitir con ello. Por lo pronto, hay que esperar al 22 de febrero para que el juego se ponga a la venta y ver cual es su repercusión.