No es un pájaro ni un avión, es una posibilidad técnica
No he sido para nada sutil en el pasado cuando se trata de cuánto desprecio los juegos de Ubisoft. La fórmula de mundos abiertos repletos hasta el cansancio de objetivos sin mayor relevancia, como coleccionables que carecen de cualquier valor intrínseco, tesoros que equivalen a unas cuantas monedas de juego, munición para nuestras armas y objetos con los que craftear aún más municiones o mejoras para nuestras armas no es algo que me llame la atención. Y aparte de que ver tanto icono en el mapa agobia, también le quita todo el sentido a explorar el mundo abierto; es más eficiente e incluso menos cansino sólo guiarse por los puntos, obtener lo que necesitemos y ya. E incluso más que eso, siento que la fórmula que usa Ubisoft en la mayoría de sus títulos representa todo lo que está mal en el espacio triple A.
Entonces resulta algo -si es que no bastante- hipócrita de mi parte disfrutar tanto de la franquicia Marvels Spider-Man de Insomniac Games que, en esencia, sigue la fórmula Ubisoft a cabalidad. La diferencia, a un nivel totalmente personal, es que soy un fan -cómo odio esa palabra- del arácnido desde que estaba en el principio de mi segunda década de mi vida, gracias a la serie animada de este ícono de los cómics de los años 90s. Y si he de defenderme de alguna forma, es que no sólo siento que la fórmula de mundo abierto lleno de misiones secundarias tanto scripteadas como emergentes se justifican a la perfección con la representación de este superhéroe en todas sus versiones, sino que además hay elementos genuinamente interesantes dentro de este contenido. Por una parte, el sólo desplazarse por la ciudad es un gusto tremendo, la mayoría de misiones emergentes de acaban en menos de 5 minutos y algunas misiones secundarias pueden resultar desde muy divertidas hasta emotivas -pobre hombre y sus palomas, siempre te recordaré-; aunque éso no quita que hayan otras que están sobrando bastante.
El cabecilla de DC podría ser más factible de lo que creemos
¿A qué viene todo? Que el título del artículo habla de Superman, no de Spider-Man. Bueno, como ya muchos se habrán imaginado, es que específicamente Marvel’s Spider-Man 2 demuestra que la tecnología de las consolas de esta generación es lo suficientemente potente para reflejar, por fin, las habilidades del kriptoniano. El hardware actual es más que capaz de cargar una ciudad entera -o al menos general la ilusión de que lo hace- sin importar cuán rápido vayamos, pudiendo reflejar a cabalidad la ultravelocidad a la que se mueve el mayor ícono de DC. Si queremos reflejar la capacidad inhumana de viajar a la velocidad de la luz podemos justificarlo gracias a el viaje rápido prácticamente instantáneo que se es más que capaz de lograr con la tecnología existente.
El mayor desafío sería entonces crear un verdadero reto para Superman, encontrar la suficiente cantidad de enemigos que le puedan hacer frente o al menos significar lo suficiente para no ser derrotados ya no sólo de un sólo golpe, sino de algo tan insignificante como su superaliento que es capaz de congelar el aire que expulsa de sus pulmones. Pero para esto podemos tomar como ejemplo la serie animada Las Aventuras de Superman, donde se nos muestra a un Clark Kent que todavía está acostumbrándose a sus poderes y que sólo es capaz de mostrar su verdadero potencial en situaciones extremas donde se deja llevar por sus emociones. Así podríamos tener algo similar a una barra de carga de habilidades que sirvan como finishing moves frente a enemigos menores y como ataques de gran impacto contra enemigos más fuertes. También se daría el espacio a crear historias más personales del kriptoniano y su endeble relación inicial con Louis Lane y, porqué no, con otros personajes como Lex Luthor y Jimmy Olsen.
Todo es posible si se abarca desde el ángulo correcto y, oye, nadie sería más feliz que yo al ver tanto a Superman como a Spider-Man reflejados tan bien como la versión de Insomniac de este último pero sin los típicos elementos triple A que arrastran hacia abajo la experiencia. Aunque siempre se puede partir por algo y un punto de referencia tan competente como lo es Marvel’s Spider-Man sirve para crear algo que por fin le haga justicia a Superman en el medio de los videojuegos, pues que así sea. Siempre se podrá tomar lo aprendido más adelante y hacer algo más único, por mucho que mi cinismo sobre el entorno triple A me haga creer lo contrario.