"Look at me, I'm burning"
Tras años y meses de rumores recurrentes, ya puede decirse. Silent Hill está de vuelta, y como no podía ser de otra manera tras los esperpentos a la hora de publicar Metal Gear Solid V, Konami no ha decepcionado a la hora de presentar las novedades con un auténtico despropósito técnico. Primero, con una filtración (muy probablemente fruto de un despiste) que dejaba a la luz gran parte de la presentación. Más tarde, en vez de emitir la presentación en directo (o como estreno en YouTube) se subió directamente como vídeo. Y pudimos pasar directamente a lo que importaba, las novedades.
Yendo al grano, lo cierto es que se podría decir que hay mucho ruido y pocas nueces, porque de ninguno de los proyectos (y sí, son varios) se ha visto nada de gameplay, todo se ha reducido a cinemáticas. Uno de los platos fuertes es sin lugar a dudas el remake de Silent Hill 2, que empleará Unreal Engine 5 como motor gráfico y será elaborado por Bloober Team (responsables de Layers of Fear y The Medium, entre otros) y contará con Masahiro Ito (director de arte de la saga) y Akira Yamaoka (compositor original) entre sus colaboradores. Casi nada, vamos.
Entre las nuevas aventuras, si hay que destacar uno es Silent Hill Townfall, que será desarrollado por No Code (creadores de Observation y Stories Untold) y llegará publicado por Annapurna. Entre sus intenciones, respetar el legado de la saga pero con un planteamiento original. Por su lado, el último juego (relevante, ahora hablaremos de la broza restante) fue Silent Hill F, que estará en manos de Neoboards Entertainment, un estudio taiwanés, y nos trasladará al Japón de los años 60 en lo que parece ser la aventura más extravagante de las presentadas.
Pero no tan rápido, damas y caballeros, no podemos olvidar que Silent Hill es propiedad de Konami, y como no podía ser de otra manera, han aprovechado para anunciar una explotación masiva de la licencia como si de unos Pachinko se tratase. Además, en formato variado. ¿La tendencia de películas basadas en videojuegos languidece y solo Nintendo por darse de bruces con la realidad? Return to Silent Hill, con estreno en 2023 y el regreso de Christopher Gans como director tras el filme de 2006. ¿Que las experiencias interactivas están en tierra de nadie? Silent Hill Ascension llegará en streaming el 24 de julio del próximo año y promete ser tan olvidable como innecesario. Ah, y por supuesto, merchandising variado, no vaya a ser que Konami vuelva a ser una editora (ya que ningún desarrollo será propio) de videojuegos mínimamente respetable.
Y es que en esto se ha convertido la que fue una de las glorias de la industria, una mera cartera de licencias que cede sin crear nada propio, en un buen ejemplo de lo que es vivir de las rentas y las viejas glorias. Y para compensar las propuestas que resultan interesantes, productos que están claramente conceptualizados para intentar exprimir al máximo la gallina de los huevos de oro. ¿Como íbamos a esperar que Konami no hiciera lo que ya hizo con Metal Gear Solid V: Ground Zeroes?
En definitiva (y aunque me alegro por los seguidores de la saga, a los que seguro les han emocionado estos anuncios), no puedo dejar de ver esto con cierta pereza y apatía, sabiendo que el máximo beneficiario de un buen resultado está más pendiente de una línea de figuritas de exposición que del desarrollo de la mayor licencia que les queda. Ahora solo toca esperar a 2023 (en el mejor de los casos) y comprobar la calidad de la cosecha sembrada. Y tiene buena pinta, pero la niebla acecha.