¡O comes o estás castigado!
Están completamente empeñados en que nos terminemos de zambullir en su mundo. Como la abuela o la madre que se enfrenta al niño y el imposible plato de sopa. ¡Entrará, aunque sea a la fuerza! Y es que les hemos dado pie a ello, estamos tan volcados en sus redes (sociales) que ya daban por hecho que también íbamos a entrar en esto como ovejitas en redil. Supongo que lo daban por hecho, y el choque con la realidad ha sido duro. La sociedad al completo está tan ligada a redes como Instagram que parece inevitable que cada producto que salga de las entrañas de Meta arrase entre nosotros. Como si sociedad, tecnología y actualidad fueran inherentes al nombre Zuckerberg. Y claro, cuando no funciona llega la pataleta.
Y espero que siga sin funcionar, aunque no me la jugaría, por si acaso. Hablo de Meta y de su proyecto, casi distópico y escalofriante, en mi opinión, de metaverso. La compañía dueña de Facebook o Instagram se ha vuelto a hacer noticia con una polémica relacionada con su videojuego Horizon Worlds y sus primeras impresiones, que parecen indicar que el barco va a la deriva. Tanto es así que Horizon Worlds ha sido puesto en ridículo incluso por los propios empleados que trabajan en él, que prefieren evitarlo, según The Verge. En el texto publicado por esta revista se explica que los empleados critican tanto el estado técnico del juego como su calidad global, y que prefieren no jugarlo por estos motivos. En contra del empeño de papá Zuckerberg…
Incluso Vishal Shah, uno de los máximos responsables del proyecto, parece “presionar” a los empleados para forzar el uso del producto, y en un comunicado hacia sus empleados declaró que últimamente registraban un uso mucho más reducido de Horizon Worlds por parte de los empleados, y se preguntó: “¿Por qué no amamos el producto que hemos construido? Es simple, si nosotros no amamos lo que hacemos, ¿cómo esperamos que lo amen nuestros usuarios?”. Más tarde, ante los escasos resultados, volvió a insistir entre los empleados: “Todo el mundo en esta organización debería tener la misión enamorarse de Horizon Worlds. No podéis hacer eso sin usarlo. Entrad. Organizad vuestro tiempo para hacerlo con vuestros amigos y compañeros, […] para que podáis interactuar con nuestra comunidad”.
Es casi que evidente, cuando una compañía tan omnipresente en nuestras vidas como Meta lanza un producto y apenas se habla de él, cuando no hay comunidad notable… Es evidente que no ha ido bien. Apenas está presente en las redes, apenas se habla de él, lo que resulta irónico cuando estaba pensando para ser un “todo” que englobase nuestro día a día en la red. Nuestras vidas digitales, en definitiva. Sin embargo, parece no cuajar, quizá ha sido ir un poco demasiado lejos.
Pese a todo, es algo que genera más preocupación que risa. Ese empeño y esa casi obligación de que algo funcione. De que el “dueño y señor de la vida digital” casi luzca como un villano cutre que no acepta la indiferencia o el fracaso de una de sus iniciativas porque está tristemente acostumbrado a acapararlo todo. Y es inevitable preguntarnos si realmente Zuckerberg se ha dado contra un muro sólido con Horizon Worlds o si es solo cuestión de tiempo que nos acabe entrando la cuchara de sopa. Si tal vez solo necesitamos que nos insistan un par de veces más, que nos hagan creer que viene el avión.